Carlos Saura. Director

"Eso de que por ser mayor eres más sabio es una tontería"

  • Tras culminar 'La jota', el veterano realizador empezará a rodar su película sobre Picasso en septiembre.

Mito viviente del cine español, Carlos Saura (Huesca, 1932) sigue activo a sus 84 años, con la postproducción de su última película musical, La jota, y planes de empezar a rodar en septiembre su película sobre Picasso. "A mí se me olvida que tengo 84 años. ¿Por qué no voy a trabajar si tengo ganas?", plantea el director de La caza y La prima Angélica, aunque al mismo tiempo advierte de que "eso de que por ser mayor eres más sabio es una tontería". La nueva edición de Documenta Madrid, que se inauguró ayer, le dedica una retrospectiva centrada en sus películas musicales, desde Sevillanas a Zonda: el folclore argentino.

-Aparte de rodar documentales, ¿le gusta el género como espectador?

-No considero que lo que hago sean documentales, pero nadie sabe exactamente cómo llamarlo, yo tampoco. Mis películas musicales son más bien creativas. Una película que me marcó muchísimo fue Tierra sin pan de Buñuel, y pasa lo mismo, que no sé si es un documental o no, porque hay una intención creativa y está manipulado.

-¿Cómo va el rodaje de La jota?

-La imagen está montada definitivamente, ya están solucionados los problemas de estructura. Me preocupa buscar el total, que es algo que se consigue a base de trabajar cada número y luego la escenografía y la luz. Es complejo llegar a la solución final.

-Mucha gente sigue sin entender su dedicación casi exclusiva a este género en los últimos años.

- No hace tanto que rodé ficción, mi ultima película fue Io, Don Giovanni (2009), en Italia. Pero me interesa cada vez más un tipo de cine que no está de moda. El cine costumbrista no me interesa, me alejo del chico le gusta chica o problema de un niño con su mamá, que me parece muy bien que se haga, pero para mí está un poco agotado.

-¿Cuál será la línea de su próxima película sobre Picasso?

-Será una película de ficción, pero también imaginativa. Por ejemplo, hay una idea que voy a trabajar para contar la infancia de Picasso, sus recuerdos de Málaga y la guerra, que ya utilicé en La prima Angélica y que me gusta mucho, y es que una persona adulta, en aquel caso López Vázquez, pase a ser niño sin serlo, con el cuerpo de adulto.

-Solo un puñado de directores, como Woody Allen, Clint Eastwood o usted mismo, siguen rodando pasados los 80.

-A mí se me olvida que tengo más de 80 años, tengo 84, pero no me acuerdo. ¿Por qué no voy a trabajar si tengo ganas? Y si no puedo rodar hago otras cosas: escribo, pinto, hago fotos. Siempre hay cosas que hacer.

-¿Cree que es más difícil ahora hacer películas que cuando usted empezaba?

-Lo que creo es que hay jóvenes viejos y viejos jóvenes. Aunque eso de que por ser mayor eres más sabio es mentira. Todos los grandes matemáticos y físicos han hecho sus grandes descubrimientos a los veintipico. El talento y la inteligencia está en la gente joven, pero también hay que practicar las cosas.

-¿Pero cree que los jóvenes lo tienen hoy más fácil o más difícil??

-Ahora es más fácil rodar. Puedes hacer una película estupenda con cuatro actores e irte al campo. Yo hice así La caza, en cuatro semanas. Estoy seguro de que hay miles de personas haciendo cine interesante, el problema es cómo acceder a ello, es dificilísimo. Otro problema es que ya está todo inventado. Lo que hacía Dziga Vertog a principios del siglo XX es súper moderno.

-¿Qué cineastas españoles actuales le interesan?

-No quiero dar nombres porque es un lío. Pero de toda la vida se ha dicho que el cine español está mal, desde que yo empecé en el año 58 ya se decía. Yo lo que veo es que todos los años hay dos o tres películas estupendas en España. No es peor ahora que cuando empecé.

- La infancia es un tema recurrente en su cine.

-Creo que los niños son mucho más listos de lo que pensamos y los adultos no se enteran muy bien. En mi época se relegaban a un lugar diferente, donde no se enteraban de nada, y con tanta información es todo lo contrario, un desmadre total. La infancia es mundo fascinante y sobre el que en nuestro trabajo se podría aún profundizar bastante.

-¿Qué recuerdos guarda del Carlos Saura niño?

-Durante mucho tiempo he rechazado hablar de los recuerdos y mis películas, pero últimamente pienso que por qué no. Mis recuerdos de infancia son muy fuertes y están en mis películas. Son de violencia y guerra, pero yo no he sufrido la guerra. Había bombas y moría gente alrededor, pero yo lo veía como un espectáculo. Un niño no tiene la sensación del adulto. Te asustabas porque los mayores se asustaban.

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