ALBERTO empieza a oler a diputado y no se le va a pegar la moqueta en los pies porque tiene un alma joven, de calle y movilización". El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, defendió así la figura del candidato número uno al Congreso de este partido por Málaga, Alberto Garzón, en el acto central de campaña que tuvo lugar ayer en un abarrotado auditorio del Palacio de Ferias.

Dicen que Guardiola puso un vídeo de la película Gladiator a los jugadores del Barcelona para motivarles antes de la final de la Champions de 2009. IU no fue ayer menos y, minutos antes del inicio del acto, proyectaron imágenes de la película Espartaco en las que Kirk Douglas afirmaba que iba a votar a IU. Desde luego levantó aún más unos ánimos ya de por sí altos ante la expectativa de que este grupo mejore sus resultados electorales en Málaga y España ante la anunciada debacle de los socialistas en las encuestas.

IU reclamó para sí el "voto útil de la izquierda" ya que el común denominador de todos los participantes en el mitin fue hacer que ver que el PSOE y el PP "son lo mismo". "Nos han intentado vender que son dos modelos diferentes cuando tienen la misma columna vertebral", afirmó el candidato al congreso Alberto Garzón.

Cayo Lara, que fue recibido como "el próximo presidente de la Tercera República", fue más allá y culpó a PSOE y PP de "hacer recorte tras recorte", de "mentir" a los ciudadanos y hasta de "robarnos" la democracia. El coordinador federal indicó que "tras tanto ajuste y recorte del poder adquisitivo tenemos más crisis y más paro. No han servido para nada y pagamos más intereses a los especuladores, por lo que todo ha sido una mentira" a la vez que acusó al Gobierno de Zapatero y de Rubalcaba de haber dejado al país "en la ruina y con una deuda impresionante".

Acto seguido arremetió contra las ayudas al sistema financiero argumentando que "nosotros no tenemos que salvar a los bancos con el dinero de todos sino que tienen que hacerlo sus accionistas" y exigió tanto al PP como al PSOE que no se dé "ni un euro público para salvar activos tóxicos" ante un atronador aplauso de los militantes.

Los principales dirigentes socialistas y populares fueron objeto de crítica. Lara subrayó que "a Zapatero no le costará el futuro porque es posible que consiga un puesto en alguna de las empresas que ha privatizado pero deja el país con cinco millones de dramas humanos, 300.000 desahucios, dos guerras y un escudo antimisiles". De Rubalcaba, "al que han dejado en caída libre y sin paracaídas" lo acusó de "estar con los recortes y la patronal insaciable" y del líder popular, Mariano Rajoy, dijo que "miente con todos los dientes de su boca porque dice que no va a hacer recortes y los están haciendo en las comunidades que gobiernan".

Uno de los mensajes más repetidos ayer fue que IU representa a la auténtica izquierda, que hay que luchar contra el bipartidismo y que este partido, como señaló Lara, "no se rinde, no se arruga y le va a parar los pies a la derecha" o, como indicó Diego Valderas, coordinador regional, "somos la izquierda decente y coherente, la que no se vende ni es sumisa porque Rubalcaba y Rajoy ya no engañan a nadie y todo el mundo los tiene calados". Nuevos vítores y alzar de banderas del partido y alguna que otra republicana para caldear aún más un ambiente en el que se respiraba optimismo y el presentimiento de que esta vez IU sí puede lograr algo grande.

Hablaron el coordinador provincial, José Antonio Castro; la candidata número 2 al Congreso, Amanda Meyer; el concejal y candidato al Senado, Pedro Moreno Brenes, y le llegó el turno a Alberto Garzón. Con una voz mucho más calmada que sus antecesores pero firme en sus convicciones, hizo hincapié en que "el mundo está patas arriba y a la izquierda le corresponde ponerlo derecho". Precisó que "esta crisis está revelando que esto no es una democracia sino una farsa que disfraza la dictadura de los mercados, que impone gobiernos títeres" y añadió que la lucha de clases "sigue vigente". Defendió que el programa de IU es "viable, factible y riguroso", apostó por la redistribución de la renta, la nacionalización de la banca o la recuperación de empresas públicas y pidió "cambiar el miedo que alientan los votos al PP y PSOE por la ilusión y futuro de los votos de IU". "No queremos rescates bancarios sino rescates a los ciudadanos" continuó ante un público al que ya casi le dolían las manos de aplaudir.

"Alberto es más listo que Rubalcaba y corre los 100 metros lisos más rápido que él". Esta vez el elogio salió de boca de Diego Valderas. Padrinos no le faltan al joven candidato de IU como tampoco apoyo de un partido que quiere dar una imagen de rejuvenecimiento y de entrada de ideas frescas. El domingo se verá si tiene resultado.