CON la Ejecutiva del PSOE, que encabeza Pedro Sánchez, se ha detectado otro caso de amnesia histórica. Se está diciendo en las tertulias eruditas que el PSOE español va a quedar tutelado por el andaluz, y se destaca su influencia. ¡Como si fuera una novedad! Micaela Navarro llega a su cargo después de que lo ocuparan en este siglo XXI Manuel Chaves y Pepe Griñán, ex presidentes de la Junta. Y si Susana Díaz no es también la presidenta del PSOE es sencillamente porque a ella no le ha dado la gana, y ha puesto a Micaela, mujer de buen talante. Guste o no, el cargo de presidente del PSOE tiene más de florero de rosas que de puñetazo en la mesa. Otras veces era un premio de jubilación, pero ya no.

Los presidentes de la Junta de Andalucía siempre han estado muy considerados en el PSOE. Ahora no iba a variar, pues las únicas nacionalidades o regiones donde gobiernan son aquí y en Asturias, que no es lo mismo. Además de la importancia cualitativa para los socialistas, está la cuantitativa. Nos han acostumbrado a que Andalucía pinte poco o nada en la política española, y que sólo salga en los telediarios cuando hay un suceso gordo, un imputado de la juez Alaya, o la gente se achicharra en las playas. Y se olvida un detalle importante: de los 47,2 millones de españoles, casi 8,5 millones son andaluces. Casi uno de cada cinco españoles es andaluz. Si un partido se columpia en Andalucía, la comunidad con más habitantes, no gobierna en España. En las últimas elecciones generales de 2011 el partido más votado aquí fue el PP; y en las autonómicas de 2012 también, aunque no lo suficiente para conseguir la mayoría absoluta. Si ahora hubiera elecciones en Andalucía, afirman las encuestas que ganaría el PSOE con Susana Díaz. Pero ahora no hay elecciones, y ya se verá en su momento.

Decir que el PSOE de Pedro Sánchez baila al son que le marcan desde Andalucía es una redundancia y una perogrullada. Tampoco es novedoso. No olviden que en el PSOE, durante más de dos décadas, mandaron Felipe González y Alfonso Guerra, que eran andaluces y sevillanos. Y que después pusieron a Chaves y a Griñán como presidentes del partido. Y que los jóvenes que nacieron hace 37 años sólo han conocido gobiernos autonómicos del PSOE en Andalucía, aunque todavía no es la California del sur de Europa, ni la Dinamarca del norte de África. En fin, que la vida sigue igual, aunque con otros y otras.