Temida por los famosos, adorada por los especatadores, María Patiño lleva media vida dedicada al mundo del corazón. Siempre en un segundo plano, sabía extraer todo el jugo de los personajes a los que entrevistaba. Ahora deja a un lado su puesto como colaboradora de Sálvame Deluxe para tomar las riendas del programa nocturno coincidiendo con las vacaciones de Jorge Javier Vázquez.

-Pregunta obligada, ¿es un reto convertirse a estas alturas en presentadora?

-Más que un reto es una responsabilidad. Si pienso en ello como un reto me bloqueo. Solo espero estar a la altura de las circunstancias y disfrutar.

-Durante sus años de estudiante en Sevilla ¿se imaginaba en la tele?

-Lo cierto es que no. Todos tenemos ambiciones, pero jamás me imaginé llegar tan lejos. En mi vida profesional todo ha ido muy rápido, delante de mí han pasado muchos trenes y yo he decidido subirme en todos.

-Siempre se ha dedicado al mundo del corazón, ¿ha sentido curiosidad por otro tipo de periodismo?

-Considero que para hacer bien tu trabajo tienes que dominar la materia y yo, después de tantos años lo hago. Además, me encanta.

-¿A quién le gustaría entrevistar en esta etapa?

-A Isabel Pantoja. Es un personaje del que se habla muchísimo, pero que nose deja entrevistar. Si tuviera la oportunidad de entrevistarla sería cara a cara, mirándonos a los ojos y sin ningún tipo de veto, que yo pueda preguntar lo que quiera. Además, creo que a ella le vendría bien hacerla, saldría reforzada.

-¿Qué colaborador es el más difícil de torear?

-Torearlos a todos va a ser difícil porque todos hablan muchísimo y son muy tajantes con respecto a sus opiniones, por eso habrá que aprender a adaptarse y acoplarse. Pero a mí me encantan los obstáculos, por eso creo que todo va a salir rodado.

-Es imposible no tener un colaborador preferido o con el que se tenga más afinidad, ¿cuál es el suyo?

-Para mí Gema López es como mi hermana, son muchos años los que hemos estado trabajando juntas y es lógico que la considere como tal. A Chelo le tengo especial aprecio por eso mismo. Mila es un personaje que me fascina, sabe dar juego televisivo y sabe cuál es su papel en cada momento, me siento muy identificada con ella.

-¿Cuál ha sido la situación más complicada a la que se ha enfrentado en un plató del corazón?

-Una vez que entrevisté a Carmina Ordóñez. Ella era un personaje potente, pero yo sabía que ella no se encontraba bien. Eso fue muy duro. Pero de ese tipo de cosas al final aprendes

-Lola Flores solía decir qué hablen mal de mí, pero qué hablen, ¿opina usted igual?

-No exactamente. Estar en primera fila tiene sus pros y sus contras. Estando detrás de la barrera puedes realizar tu trabajo cómodamente. Ahora voy a estar mucho más cuestionada, analizada y criticada, aunque prefiero dejar esos pensamientos en un segundo plano para no paralizarme y poder trabajar de manera cómoda. Mejor, que hablen bien.

-¿A las demandas se termina acostumbrando?

-Nunca, porque es algo muy desagradable. Pero me fascinan los juicios. Allí tienes más licencias para hablar y puedes decir cosas que en un plató, por diversas circunstancias, no puedes hacer públicas.

-Cuando Jorge Javier regrese a su cortijo y usted pueda coger vacaciones ¿dónde le gustaría ir?

-Me encantaría ir a Fuerteventura, porque estoy enamorada de la isla.

-Ahora que tiene más protagonismo en el mundo del corazón, ¿teme perder tranquilidad?

-Eso va en el sueldo. Tienes que ser coherente y no querer estar en misa y repicando.