Regalos, citas familiares y ¿su primer acto oficial en Reino Unido? Los duques de Cambridge preparan ilusionados la Navidad de su hijo, el príncipe George. Aunque no  son las primeras, Guillermo y Catalina tienen muchas ganas de que su pequeño comience a conocer en qué consisten estas entrañables fiestas, ya que el año pasado, con sólo cinco meses de vida, era demasiado bebé para enterarse. Según Hello!, la edición inglesa de la revista ¡Hola!, el matrimonio está barajando la posibilidad de que su niño les acompañe en el paseo a pie desde Sandringham House, donde la Familia Real británica se reúne para almorzar, a la iglesia de Santa María Magdalena -con la excepción de Isabel II, que hace el recorrido en coche- en la mañana de Navidad. Grandes multitudes se concentran todos los años para saludar y felicitar a los miembros de la realeza, una oportunidad perfecta para que el primogénito de los príncipes conozca a sus compatriotas. El pequeño ya demostró su adaptabilidad en el viaje oficial que a principios de año realizó junto a sus padres por Nueva Zelanda y Australia, así que no tendrá problema si finalmente acompaña a sus familiares en el acto.

Además del tradicional té  en la tarde víspera de Navidad, con la Reina como anfitriona y reparto de regalos incluido, y los actos religiosos, los príncipes Guillermo y Catalina desean que su vástago disfrute de las fechas navideñas en el calor del hogar, abriendo regalos al amanecer y tomando chocolate. Ésta será la última Navidad de tres en la casa de los duques de Cambridge, en abril ampliarán la familia, así que el año que vienen serán cuatro. O cinco, si se confirma que vienen dos.