No puede disimular su pasión por el sur. Vicky Martín Berrocal presume de su condición de andaluza y asegura que se siente flamenca con volantes o sin ellos. Ahora que está a punto de celebrar su décimo aniversario en el mundo de la moda, Nocilla ha confiado en ella para plasmar su arte andaluz en una nueva colección de vasos. Lunares, encajes y flores son los elementos fundamentales de una línea en la que, aunque quisiera, no podría esconder su enamoramiento por esta tierra.

-Lo mismo plasma su arte en un traje de flamenca que en un vaso de Nocilla...

-Así es. Ha sido un proyecto que me ha emocionado. Me gustó mucho desde que me lo propusieron y no me ha costado nada, sobre todo porque soy una mujer Nocilla. Mi madre me tenía que quitar el bote porque era capaz de comerme 10 bocadillos seguidos, por eso ahora que hayan pensado en mí para diseñar su nueva colección de vasos me ha encantado.

-Toma el relevo de otros grandes diseñadores como Victorio y Luchino o Agatha Ruiz de la Prada. ¿Qué pensó cuando se lo propusieron?

-Para mí ha sido un regalazo arrancar el año de mi décimo aniversario en el mundo de la moda con un proyecto tan bonito como éste. Me suelo mover por proyectos que me emocionan y éste, sin dudarlo, ha sido uno de ellos. Por eso no lo pensé cuando me lo propusieron, aunque me ha costado mucho mantenerlo en silencio hasta ahora. Quería gritarlo a todo el mundo porque es un proyecto que creo que gustará.

-Por supuesto, el flamenco tiene mucho que decir también en este proyecto.

- No puede ser de otra forma, yo soy flamenca con volantes o sin ellos. Es una colección llena de fuerza, de pasión, de verdad y de autenticidad. En ella, los lunares, las flores y los encajes son los protagonistas. A mi me encantó hacerlo y no me supuso ningún trabajo y a Nocilla parece que también le gustó, porque no hizo ningún cambio.

- Ha dicho que su madre cuando era pequeña tenía que quitarle el tarro de Nocilla de las manos pero, ¿es de las que cuando come chocolate siente luego remordimientos?

- No identifico la Nocilla sólo con mi pasado porque aún sigo comprándola. Y no. No siento ningún remordimiento cuando la tomo porque soy de las que cuando hago algo en la vida, ya sea en cuestión de comida, de amores.... lo hago sabiendo lo que hago, por lo que luego no hay lugar al arrepentimiento.

-En más de una ocasión ha dicho que su fuente de inspiración a la hora de diseñar es el amor ¿Lo ha sido también en esta ocasión?

-Mi mayor referente es siempre la mujer. Lucho por resaltar su sensualidad y elegancia en cada uno de mis diseños para que la mujer se sienta bella. El amor, como es lógico, forma parte de todo eso. Es importante sentir y alborotarse, pero el amor también va unido al sufrimiento que, aunque no lo parezca, también te hace crear.

-Para el próximo 5 de febrero prepara un desfile mágico con motivo de su décimo aniversario en el mundo de la moda. Y algunos que pensaron que lo suyo en esto era sólo un capricho...

-Todo se demuestra con el tiempo. Yo sabía donde me metía y es cierto que arrancó como una aventura, pero desde hace muchos años se convirtió en una realidad. No se trata de ningún capricho y de eso tengo que dar gracias infinitas a la mujer, que me ha dado su cariño desde siempre y me ha arropado en esta aventura tan apasionante. Cuando noto ese cariño no sé cómo puedo devolver tanto.

-Y por eso quiere sorprenderlas con este gran desfile.

-Sí. Será una noche mágica. No sé si llegaré a cumplir 20 años en la moda por eso quiero celebrar los 10 años por todo lo alto. Será un espectáculo que no dejará a nadie indiferente. He echado la casa por la ventana para este día tan especial. Desde los tejidos elegidos hasta las formas y los volúmenes... Ahora se presenta otra Vicky. En estos dos años he evolucionado y no quería presentar nada que se pareciera a mi última colección. Al principio me sentía insegura y, cuando arranqué a diseñarla el pasado mes de septiembre, me dio miedo: miraba mi vida y no me encontraba. En esta colección sorprenderé con piezas únicas, de alta costura. Presenté mi última colección hace dos años y tenerme todo este tiempo callada ha provocado que ahora vomite todo lo que se me ha ido ocurriendo desde entonces. Creo que he conseguido fusionar el flamenco y el lujo y elevar las piezas al súmmun. No se va a olvidar algo así. No obstante, tengo que confesar que tengo inseguridad y mucho miedo, aunque no me molesto ni me da miedo que no guste a los demás.

-¿Qué le ha dicho su hija Alba de este cambio?

-Mi hija Alba está indignadísima conmigo porque no sabe nada de lo que se verá en el desfile. Hasta ahora siempre he compartido con ella mis nuevas colecciones, pero esta vez lo he querido mantener en secreto para que también ella se sorprenda. No deja de repetirme que no lo entiende, así que en esas estamos.

-¿Le gustaría que siguiera sus pasos en el mundo de la moda?

-Me encantaría. Ella lo ha mamado de mí como yo lo mamé de mi madre, así que no me sorprendería que quisiera dedicarse a esto.