La imagen de Ingrid Bergman presidía la escalinata del Grand Theatre Lumiere de Cannes; su mirada tranquila y señorial servía de presagio a lo que sucedería en esta misma alfombra roja a última hora de la tarde. Cannes se convirtió de nuevo en el mejor escenario europeo para mostrar el glamour del cine a este lado del charco. Firmas exclusivas y joyas imponentes; Cannes se rindió, otra vez, a las grandes estrellas.

En la red carpet de este año hubo, si cabe, más glamour que en ediciones anteriores. La actriz australiana Naomi Watts y su vestido de falda de plumas y escote en V fue una de las mejor vestidas de la noche. Junto a ella, una espectacular Julian Moore, que optó por un vestido de gasa gris con pedrería y chaquetita negra con incrustaciones de plumas y de escote interminable que destacaba su espectacular figura. Natalie Portman, una de las primeras en posar junto al Grand Theatre Lumiere, optó por un vestido recto en tono rojo en el que destacaba, sobre todo, su original escote en W invertida.

La belleza de Bar Refaeli tampoco pasó inadvertida. La guapa modelo israelí llegó al estreno de la película francesa La tête Haute que abría la 68 edición del festival enfundada en un elegante vestido blanco y el pelo recogido en una coleta que destacaba aún más sus ojos verdes. La modelo llegó acompañada por el fundador de Grisogono, Fawaz Gruosi.

Pero Rafaeli no fue la única modelo que posó ayer en la alfombra roja de Cannes. También Doutzen Kroes llegó arrasando a la ciudad francesa. Vestida de blanco impoluto y con el pelo recogido, Kroes destacó, sobre todo, por el corte asimétrico de su vestido, cuyo escote dejaba al descubierto uno de sus hombros. También la maniquí estadounidense Karlie Kloss se dejó ver en el festival de cine, aunque su vestido no fue del gusto de todos. La modelo optó por un diseño de lamé plateado que se recogía con dos hebillas en un lateral y que dejaba al descubierto su torso, que cubría con un minúsculo top blanco. La modelo israelí Hofit Golan se decantó en cambio por un diseño más vaporoso que combinaba el nude con el encaje negro.

Entre los miembros del jurado destacó el estilo de la actriz británica Sienna Miller, que apostó por un elegante vestido azul petróleo con escote asimétrico que terminaba con una gran lazada negra en uno de sus hombros. También en la presentación matinal, Miller se hizo notar con un vestido a media pierna en tonos grises y negros de Alexander Wang para Balenciaga. En el jurado estuvo una de las pocas representantes españolas de este año en el festival de Cannes, la actriz Rossy de Palma, que llegó a la alfombra roja con un vestido negro terminado en cola y escote en U rematado con encajes.