Pasarela

53 años juntos

  • Los Reyes eméritos celebran su aniversario de bodas separados por miles de kilómetros. Que ambos coincidan en un acto público es cada vez más difícil.

Llevan más de media vida juntos pero cada vez es más difícil verlos coincidir en cualquier acto público. Don Juan Carlos y doña Sofía celebraron ayer su aniversario de bodas. Hace 53 años que se dieron el sí quiero, o mejor dicho el né theló, en la catedral de San Dionisio de Atenas. Aquella celebración, a la que acudieron 27 casas reales de toda Europa, fue una boda por todo lo alto. Se prometían tiempos felices para aquella pareja de veinteañeros.

Han transcurrido más de cinco décadas desde entonces y la felicidad y complicidad de aquel matrimonio lleva años en entredicho. Don Juan Carlos y doña Sofía no celebraron ayer aquella unión; es más, según han publicado diversos periódicos de la República Dominicana, el rey emérito se encuentra en la isla caribeña participando en el encuentro empresarial Padres e hijos organizado por familias influyentes del citado país y con las que don Juan Carlos mantiene una estrecha relación, como los Fanjul o los Cisneros.

En un día tan especial como el de su aniversario de bodas, el matrimonio ha estado separado por más de 6.000 kilómetros, aunque no hace falta esperar a una jornada especial para darse cuenta del distanciamiento de la pareja. Desde la abdicación en su hijo Felipe, la agenda oficial de don Juan Carlos apenas tiene actividad y cada vez que trasciende cualquier acto en el que ha participado el rey emérito éste está relacionado con su vida privada y el monarca se encuentra sin la compañía de su esposa. Aun así, tampoco se deja ver en las reuniones familiares. El pasado verano apenas coincidió con los suyos en el Palacio de Marivent ni tampoco acompañó a los Reyes a la tradicional Misa de Pascua en la catedral de Palma, un acto al que sí acudió su esposa. No asistió, ni tan si quiera, a la comunión de su nieta Irene, celebrada a principios de mayo en Suiza, un evento familiar que prefirió cambiar por el campeonato de motociclismo de Jerez.

No sucede lo mismo, en cambio, con la vida pública de Doña Sofía. A pesar de que ha delegado en su nuera casi todos los actos oficiales de su anterior agenda, sigue mostrando su apoyo a las causas benéficas y culturales, como ha sido habitual en ella en las últimas décadas. La madre de Felipe VI pasa largas temporadas en Palma de Mallorca y, a diferencia de su esposo, apenas trascienden los viajes que realiza al extranjero, salvo las visitas que realiza a su hija Cristina en Suiza coincidiendo con las fiestas escolares o los cumpleaños de los pequeños. La última vez que estuvo con ellos fue en la comunión de la pequeña Irene Urdangarín, ya que la Reina siempre ha demostrado que arropa a los suyos sin importarle los asuntos pendientes con la justicia que tienen algunos de sus miembros.

No es de extrañar que el matrimonio Borbón Grecia no haya celebrado su 53 aniversario de casados. Tampoco lo hizo en otras fechas más señaladas, como sus bodas de oro, que coincidió con la crisis de los elefantes de Botswana. Aquella vez dijeron que habían celebrado la efemérides con un almuerzo familiar en La Zarzuela. Ahora, ni eso.

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