El Ayuntamiento de Rincón de la Victoria ha planteado la implantación de una rotonda en la Avenida de la Candelaria para mejorar el tráfico que llega desde la autovía para acceder al centro del municipio. El próximo lunes comenzarán los trabajos previos de señalización y demolición para acometer las obras de mejora que permitirán una mayor fluidez en esta vía con la confluencia del Camino Viejo de Vélez, Calle La Corta y Calle Sierra de Almijara. El concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Antonio Manuel Rando (PP), indicó que esta avenida es una de las más vías de comunicación más importantes entre la zona centro del núcleo rinconero y la Autovía del Mediterráneo, por lo que "vamos a ejecutar una obra que mejorará sustancialmente la regulación del tráfico rodado donde se conectan la Avenida de la Candelaria, el Camino Viejo de Vélez, Calle Sierra Almijara y Calle La Corta".

Según explicó el edil el objetivo es ordenar el tráfico rodado en este cruce mediante la implantación de una rotonda, además de efectuar una conexión viaria de nueva planta en la misma y las calles La Corta y Sierra de Almijara. "De esta forma evitaremos los cruces de calles actuales, que complican las múltiples maniobras que se dan en la zona", destacó.

Los trabajos de remodelación han sido adjudicados a la empresa Probisa por un valor de 524.000 euros IVA incluido. Rando señaló que la obra deberá estar terminada para el verano. "Después de Semana Santa comenzará la primera fase, siempre y cuando la meteorología lo permita", añadió .

Por su parte, el alcalde de Rincón de la Victoria, Francisco Salado (PP), indicó que estos trabajos mejorarán la estructura e imagen de una de las zonas más transitadas en el municipio, tanto por vehículos como por peatones. "Con esta obra no solo estamos consiguiendo mejorar la fluidez del tráfico, sino también la imagen de ciudad moderna, ya que una de las entradas a Rincón de la Victoria más transitadas cambiará completamente su estructura", agregó.

El regidor aclaró que el tráfico rodado apenas se verá afectado en el transcurso de las obras, "solamente la Calle Sierra del Almijara, que quedará sin salida en su incorporación a Calle La Corta. Las obras se han planificado de manera que no influyan en la circulación debido al gran flujo de vehículos que se da a diario en esta zona". En los trabajos previos se demolerán todos los pavimentos existentes, tanto en la acera como en la calzada, todos los servicios urbanos aéreos y parte de los servicios subterráneos. Además, se desmontarán los elementos de mobiliario y la señalización urbana. La obra, que consta de dos fases, quedará rematada con la instalación de zonas ajardinadas, papeleras y bancos.