El Pleno del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria hizo ayer efectiva la caducidad del convenio de Huerta Julián firmado hace nueve años con las empresas Veganarcea y Gestión Portafolio. El acuerdo se ha finiquitado a petición de la promotora que por motivos económicos ha decidido dejar pendiente las 200 viviendas previstas en el centro de la localidad. Con ello, se libera de asumir cargas urbanísticas por valor de 5,8 millones.

No obstante, la caducidad del convenio también ha llevado al Ayuntamiento a incoar los correspondientes expedientes para comprobar el cumplimiento de las contraprestaciones devengadas por la construcción de la primera fase. Entre otras, según citó el concejal de Urbanismo e Infraestructura, Antonio Manuel Rando (PP), el encoframiento del arroyo Pajaritos, la terminación del vial del edificio Ceuta y Melilla y la prolongación de la calle William Shakespeare hasta la Avenida del Mediterráneo.

Además, el Consistorio ha decidido bajar la densidad de viviendas previstas para la zona de Huerta Julián en 36.000 metros cuadrados de techo. Según el edil, "la caducidad de este convenio responde a la política urbanística del equipo de gobierno de impulsar espacios menos saturados de edificaciones, primando los servicios ciudadanos".

Asimismo, el Pleno dio conocimiento del acuerdo de la Comisión Provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo para discriminar el uso residencial con respecto a otros en suelos no urbanizables. "Este acuerdo permitirá que esos sectores no urbanizables sirvan para ubicar equipamientos públicos o privados como, por ejemplo, una residencia para la tercera edad", añadió Rando.