Rincón de la Victoria no tuvo ayer debate sobre el estado del municipio. Los cuatro partidos que constituyen la oposición - PSOE, IU, PSIRV, y PA - abandonaron el salón de Plenos tras realizar sus respectivas intervenciones al no estar de acuerdo con el modelo de sesión planteado por el equipo de Gobierno del Partido Popular.

Sus quejas se centraron en que la convocatoria había sido a petición de los grupos de la oposición, y sin embargo, el turno lo abría y cerraba el presidente de la mesa, Francisco Salado (PP). La reacción cogió por sorpresa al equipo de gobierno ya que, según aseguró el regidor "era el mismo que se aplicó el año pasado para el debate sobre el estado del municipio y el mismo que se había consensuado para hoy (por ayer), dos intervenciones de cada grupo y la introducción y cierre por parte de la presidencia".

Antes de la salida de los ocho ediles de la oposición tampoco había habido debate. El alcalde enumeró todas las actuaciones realizadas durante sus tres últimos años de mandato de los que destacó el saneamiento de las cuentas municipales y el aumento del presupuesto social. El regidor hizo hincapié en la evolución del remanente de Tesorería, que ha pasado de 13 millones de euros en negativo en el año 2008 a 4 millones en positivo durante los años 2012 y 2013. Sobre su proyecto de gobierno dijo que era "diligente y cercano al ciudadano". Similar actuación fue la de la portavoz del PSOE, Encarnación Anaya (PSOE) que tras criticar la gestión de Salado, entre otras, las prórrogas a la Empresa Mixta de Medio Ambiente y Aquagest o "la privatización del alumbrado público", también relató cada uno de sus logros durante su etapa de gobierno. Su homónimo en Izquierda Unida, Pedro Fernández Ibar, se mostró como "una alternativa real de gobierno" con una batería de propuestas "para mejorar la calidad de vida en Rincón de la Victoria", recopilación de las ya presentadas a lo largo de los tres últimos años.