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Las chorreras de Balastar, una joya natural desconocida

  • Este paraje natural de Faraján presenta un imponente salto de agua de 22 metros de altura.

La Serranía de Ronda cuenta con múltiples atractivos turísticos, culturales y medioambientales que son sobradamente conocidos, lo que hace que sea una zona de peregrinaje para muchos amantes de la naturaleza, el senderismo y las actividades al aire libre. No obstante, no todas las joyas existentes son tan famosas y conocidas, y por tanto, visitadas. Una de las grandes desconocidas la encontramos en el municipio de Faraján y sus alrededores, donde destacan dos imponentes saltos de agua más conocidos como las chorreras de Balastar.

Este espectacular y poco conocido paraje natural se encuentra ubicado al noroeste del casco urbano de la localidad, a poco más de medio kilómetro del pueblo, aunque en la actualidad sólo está habilitado el sendero que lleva a la primera de las dos chorreras.

El camino de acceso parte de la derecha de la calle principal del municipio, justo antes de llegar a la Plaza de Andalucía. El recorrido, que debe hacerse a pié, se inicia con un descenso por la vereda del Charco de unos 400 metros, punto en el que es necesario desviarse hacia la izquierda para continuar alrededor de 100 metros hasta llegar a la primera chorrera.

Todas las personas que decidan acudir a ver esta maravilla natural podrán disfrutar de un espectacular salto de agua de unos 22 metros de altura, que es debido a la escarpada orografía del terreno. Además, en el entorno de las chorreras de Balastar se pueden observar numerosas acequias de canalización y distribución de aguas excavadas en la propia roca y que datan de la época musulmana, con las que los antiguos pobladores del asentamiento árabe de Balastar aprovechaban el abundante caudal. En el entorno, que se caracteriza por su relieve kárstico, destacan las zonas de bancales en las que los vecinos de Faraján cultivan sus huertos y tienen sus propios árboles frutales. Casi al final del recorrido del sendero se hayan las ruinas de un antiguo molino que se servía de la fuerza del agua para realizar su labor y, por debajo del mismo, junto a la cascada, ha sido habilitada una pequeña área de descanso, justo a la sombra de un nogal.

Por otro lado a unos 100 metros del primer salto de agua se encuentra la segunda chorrera, de unos 20 metros de altura, a la que es imposible acceder debido a que el camino que llega hasta ella está interrumpido por algunas propiedades de uso privado.

En este sentido, desde el Ayuntamiento de Faraján se ha afirmado que existe el firme propósito de, en un futuro próximo, habilitar un sendero de carácter circular con un recorrido que discurra por las dos chorreras de Balastar. Con ello, el consistorio pretende poner en valor uno de los rincones más significativos y de mayor belleza del municipio del que podrán disfrutar tanto vecinos como visitantes.  

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