Una mujer de Gerona de 56 años murió la noche del miércoles después de que el domingo comiera una seta tóxica a la hora de cenar.

El Hospital Josep Trueta de Gerona informó ayer en un comunicado de que la mujer ingresó el miércoles a las 16:00 en el centro sanitario en una situación "de extrema gravedad".

La paciente presentaba un fallo multiorgánico que le supuso la muerte cuatro horas después de haber ingresado en el Hospital Josep Trueta.

El marido, que también consumió setas tóxicas, se encuentra ingresado en este centro sanitario, aunque está estable y fuera de peligro.

El matrimonio salió el domingo a buscar setas, que se comieron a la hora de cenar. Al día siguiente, la mujer empezó a encontrarse mal y acudió al Hospital Santa Caterina de Salt (Gerona) donde, tras atenderla, le dieron el alta con las recomendaciones a seguir.

Las analíticas realizadas han permitido determinar que la paciente había ingerido una oronja verde (amanita phalloides), conocida en Cataluña como farinera borda, una seta altamente tóxica.

Por el contrario, las muestras tomadas al marido han dado negativo en el consumo de esta seta tóxica.