El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ha recordado que los inmigrantes que viajaban en la embarcación siniestrada este domingo en el Mediterráneo eran "personas, no números" y ha pedido ayuda a los países vecinos para impedir que se repitan este tipo de tragedias. "Tenemos que dejar de pensar que han muerto números, han muerto personas: mujeres, hombres y niños", ha afirmado Renzi en rueda de prensa tras un consejo de ministros extraordinario con motivo del naufragio.

Renzi ha explicado que aún es difícil saber qué ha ocurrido exactamente, pero ha destacado "el trabajo que está haciendo Italia en condiciones de casi soledad, a veces en compañía de otros países". "Es objetivamente extraordinario". El mandatario italiano ha destacado que 18 barcos, 7 de ellos buques militares italianos, han sido movilizados para intentar rescatar a los náufragos y ha anunciado el compromiso del Gobierno de recuperar la embarcación. Para Renzi, el "verdadero problema" es "la nueva esclavitud" de los "traficantes de personas".

Como solución, Renzi ha apelado a Europa para que "no nos dejéis solos". "Es una cuestión política, de dignidad del hombre. Hay que detener este tráfico de seres humanos", ha afirmado. Por ello, ha informado de que ha pedido un Consejo Europeo extraordinario "porque tiene que surgir la solidaridad de la vecindad de Europa mostrada en otras ocasiones". Renzi ha cancelado sus actos de campaña electoral para regresar a Roma, donde ha celebrado un consejo de ministros extraordinario para abordar la situación de los inmigrantes tras el naufragio.

Bruselas pide "acciones inmediatas"

La Comisión Europea ha manifestado su "profundo desazón por los acontecimientos trágicos" en el Mediterráneo tras el nuevo naufragio de un barco con 700 personas a bordo entre las costas de Italia y Libia y ha recordado la "obligación moral y humanitaria de la Unión Europea en su conjunto de actuar", al tiempo que ha dejado claro que se necesitan "acciones inmediatas para impedir la pérdida de más vidas y un enfoque completo para gestionar mejor la inmigración en todos sus aspectos". "La Comisión Europea expresa su profundo desazón por los acontecimientos trágicos en el Mediterráneo este domingo, pero también de los últimos días y semanas. La realidad es dura y nuestras acciones por tanto deben ser fuertes", ha asegurado en un comunicado, en el que insiste en que hay "vidas humanas en riesgo y que la Unión Europea en su conjunto tiene la obligación moral y humanitaria de actuar" y se trata de una responsabilidad de los Veintiocho y la UE que requiere "una respuesta europea conjunta".

"Lo que necesitamos es acciones inmediatas para impedir la pérdida de más vidas y un enfoque completo para gestionar mejor la inmigración en todos sus aspectos", ha recalcado el Ejecutivo comunitario, que ha recordado que está consultando en la actualidad con los Estados miembros, las agencias europeas y las organizaciones internacionales para "preparar una nueva Estrategia Europea de Migración" que adoptará "a mediados de mayo".

El Ejecutivo comunitario ha explicado que "gran parte del enfoque" en el que trabaja pasa por "trabajar con terceros países" porque mientras "los países de origen y de tránsito no tomen acciones para impedir estos viajes desesperados la gente continuarán arriesgando su vida" para llegar a las costas europeas huyendo de situaciones de guerra y dificultades. "La única manera de cambiar la realidad es abordar la situación en la raíz", ha justificado en este sentido en la nota. Los ministros de Exteriores y del Interior tienen previsto mantener una reunión conjunta para discutir este asunto.

Por su parte, el presidente del Ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, encomendó al vicepresidente primero, Frans Timmermans, y a la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, y al comisario del Interior, Dimitris Avramopoulos, que trabajaran "muy estrechamente" en "todos" los aspectos para preparar la nueva Estrategia y "la rápida y eficaz aplicación de todos los instrumentos de la UE" ya disponibles.

Hollande pide reunión de la UE

El presidente de Francia, François Hollande, ha pedido este domingo que se realice un nuevo encuentro de ministros de la UE para abordar la masiva afluencia de inmigrantes que provienen de las costas de Libia, después de que esta semana se haya dado por muertas a unas 500 personas que trataban de llegar a Italia cruzando el Mediterráneo.

"Si esto se confirma, sería el peor desastre en el Mediterráneo de los últimos años", ha asegurado Hollande a la cadena francesa Canal+. Según el mandatario francés, las operaciones de rescate y prevención de desastres requerirán "más barcos, más sobrevuelos y una batalla mucho más intensa contra el tráfico de personas".

Los ministros de Interior y Exteriores de los distintos Estados miembros de la UE deberían "reunirse muy pronto" para discutir inmediatamente una respuesta eficaz para evitar más muertes en el Mediterráneo. Además, Hollande ha revelado que ha mantenido una conversación telefónica con el primer ministro italiano, Matteo Renzi, sobre el problema de la inmigración.

La semana pasada se celebró en Barcelona la Cumbre del Mediterráneo, a la que asistieron todos los países de la UE y también otros países de Oriente Próximo y del norte de África, que se presentó como una "reunión informal" para abordar los problemas de la inmigración. Sin embargo, Hollande prefiere una reunión comunitaria donde se tomen medidas ejecutivas inmediatas.