El Unicaja cabalga, ufano y victorioso, a lomos de Mindaugas Kuzminskas para contar sus partidos por victorias. Le pegó una buena tunda a un limitado Fuenlabrada que tiró pronto la bandera blanca, incapaz. Fue un KO por demolición. Vuela el Unicaja, en unos niveles de poderío físico inaguantables para muchos equipos de la Liga Endesa. La gran mayoría de los encuentros esta temporada en España, quizá el 70-75%, dependerán de la actitud y el estado físico con los que afronte el equipo malagueño el duelo, sin tener en cuenta al rival. No es prepotencia o pedantería, es lo que se percibe en los primeros instantes de la competición. Eso sí, debe haber una concentración alta para tener ese colchón. Varios jugadores tienden a la dispersión, por ejemplo Nedovic, y es una faceta en la que caben muchas millas de mejora.

De un partido decidido ya al final del primer cuarto, por marcador y por impresiones, no se pueden extraer conclusiones definitivas, pero el Unicaja regaló un buen espectáculo al abundante público que ayer se acercó al Carpena. El rival no llamaba demasiado, pero sí lo hace el Unicaja. Si se extiende la tendencia a la Euroliga el equipo se fortificará. Bastaron 10 minutos para ver a equipo rutilante que monta contraataques con mucha facilidad cuando domina el rebote. Así construyó el Unicaja una diferencia definitiva pronto (31-14 al final del primer cuarto).

Con la velocidad y con un rutilante Kuzminskas, al que Plaza retaría en el segundo cuarto, aprovechando la baja de Jackson, a jugar de dos durante algunos minutos, defendiendo a un jugador más de 20 centímetros más pequeño como Marko Popovic. Antes había soltado el rubio una descarga de 10 puntos en seis minutos. Remontó por la línea de fondo, reboteó en ataque, metió dos triples y, más tarde, regalaría una asistencia para un alley hoop a Fran Vázquez. No es una faceta en la que el báltico se prodigue, pero es sintomático de que su confianza está por las nubes. Hay ganas de verle al mismo nivel con los mejores jugadores de Europa. Cuanto mejor lo haga más lejos estará de Málaga, paradójicamente. Pero hay que exprimir el momento para asirse a él. 

El detalle era que el provisional escolta del equipo, Kuzminskas, era el jugador más alto del equipo. Will Thomas era el quinto jugador en la rotación interior, pues Germán Gabriel fue titular tras no jugar ante el Bamberg. Son apuntes que delatan la profundidad de la plantilla que adiestra Joan Plaza. Se animó Jamar Smith con un par de tiros de killer. Se espera verlos en momentos de verdad. Un triple suyo marcaba los 25 puntos de renta (43-18) y en esa tendencia acabaría la primera mitad (47-24).

Se dejó la intensidad y la concentración el Unicaja en el vestuario y encajó un 0-9. La consistencia no se adquiere en octubre, pero estas desconexiones se pagan caras en los niveles a los que aspira a llegar el Unicaja. Un triple de Smith cortaría el parcial para empezar a jugar en esa franja cómoda de 15-20 puntos de renta. La peor señal es que Nedovic aún parece fuera de onda. Ofrece detalles de su calidad pero sin una continuidad en el juego apreciable. Cuando en un cambio Plaza se vuelve para no chocar la mano del jugador denota enfado. Y sí, el de Nova Baros aún debe entrar en combustión. Unos buenos minutos defensivos de Alberto Díaz, que con sus limitaciones juega cada minuto como si fuera el último, devolvieron el equilibrio al partido y esos 25 puntos de renta tras un trabajo fino de Will Thomas (65-40).

En el último acto el Unicaja bajó el pistón y se dedicó a administrar las rentas. Con la visita a Tel Aviv en el horizonte, el partido del jueves concentra mucha atención. Y hay muchas ganas de testar el estado del equipo de Joan Plaza en unas de los templos del básket.

Ficha técnica:

81. Unicaja (31+16+18+16): Nedovic (5), Smith (13), Kuzminskas (14), Gabriel (12), Vázquez (3) - cinco inicial - Díaz (4), Hendrix (4), Markovic (7), Thomas (7), Díez (8) y Suárez (4).

59. Montakit Fuenlabrada (14+10+16+19): Tabu (6), Urtasun (-), Wear (13), Sobin (10), Smits (9) -cinco inicial- Popovic (5), Uriz (3), Sanz (-), González (6), Scott (-) y Paunic (7).

Árbitros: Cortés, Oyón y Munar. Eliminaron por cinco faltas personales a Sobin y Nedovic.

Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada de la Liga Endesa ACB disputado en el Martín Carpena de Málaga ante 7.500 espectadores.