Una matinal plácida en el Carpena, de las que se echaban de menos. Serio y contundente, el Unicaja zarandeó al Movistar Estudiantes, le sacó del partido con intensidad y ritmo y le empequeñeció hasta derrotarle por 30 puntos (89-59). Partido coral del equipo malagueño, con puntos y protagonismo repartidos, cercano al ideal de Joan Plaza. Y con despedida final a Germán Gabriel, que con un contrato de un año y medio garantizado se marcha para jugar más en otro lugar.

Fue la versión del Unicaja que se espera en los partidos de ACB, capaz de imponer un ritmo alto al que sólo puede responder un reducido números de equipos de la competición. El dominio en el rebote es impactante en los partidos. Y el Unicaja mandaba al descanso por 24-10. Al final mandaría por 39-23. Con esa base se debe dominar un encuentro. Cuando el equipo malagueño es capaz de situar la cota de agresividad en altos niveles es, debería serlo, difícilmente resistible en la ACB. Pero esa dosis no es capaz de exhibirla fuera de casa hasta el momento. Sí le vale para sacar partidos en el Carpena, como el de ayer ante el Estudiantes, al que sometió sin piedad y con solvencia. El equipo madrileño exhibe un catálogo interesante de jóvenes españoles (Fernández, Hernangómez, Vicedo) a los que aún les queda un punto de cocción. Pero la mayoría de los partidos de la ACB dependen de lo que diga el Unicaja. Y ayer decidió lucir colmillo.

El equipo malagueño marcó los tiempos del partido desde el inicio. Situó un nivel defensivo alto que dificultó la anotación estudiantil. La diferencia de faltas evidenciaba quién ponía más brío. Era el Unicaja, que vio cómo Markovic salía pronto del partido por esa razón. Pero Nedovic y Díaz se turnaron bien en la dirección para que el jefe de Belgrado tuviera un día más plácido. Volvería en la segunda mitad para anotar 10 puntos y dejar el partido con 30 de renta. En la primera mitad, en la que estuvo el cogollo, Hendrix era el hombre diferencial del Unicaja. Se le reprocha que no es el mismo en la ACB que en la Euroliga, prácticamente dobla sus números en Europa. Pero ayer ofreció un catálogo de buenas acciones, incluyendo hasta un triple. Canalizar adecuadamente a un jugador de su talento da un salto al Unicaja. Con él de referente y buenos apoyos, como un Carlos Suárez a buen nivel, se fue poniendo tierra de por medio (23-13) aunque hubo un parón (25-20) del que se salió engrasado. Otra vez buenos minutos de Alberto Díaz en la dirección y al marcar la línea defensiva y una secuencia de triples de Hendrix, Smith y el pelirrojo pusieron la renta en la frontera de los 20 puntos (40-22).

Incluso los que no estaban finos en la anotación, como Jackson o Díez, ofrecían otras cosas al equipo, mostraban ese coraje. Hasta salió Germán y metió un triple (43-25) para dejar una estampa curiosa. Después de Hendrix, nadie metía más de cuatro puntos en el Unicaja. Pero se dominaba por 18.

Dos buenas acciones de Markovic, con mono de balón tras haber jugado sólo tres minutos en la primera parte, sobrepasaron la frontera de los 20 puntos de renta. Y ya no bajaría de ahí el Unicaja, muy metido en el partido. Cuando con 27 puntos arriba dos jugadores chocan para intentar salvar un balón que se marcha por la línea de fondo, como ocurrió con Hendrix y Kuzminskas, es que la intensidad y la mentalización para jugar 40 minutos es la adecuada. No era una cuestión baladí engordar el triunfo lo máximo posible con vistas al average para el corte de la Copa del Rey. Y se llegó a los 30 puntos de renta (65-34) tras dos tiros de un omnipresente Markovic.

El festival continuó, se llegó a una cota de 35 puntos (71-36) y después llegó algún momento de relajación. Nedovic se enganchó con dos triples para acabar como máximo anotador, tuvieron minutos él y Dani Díez, hipervoluntarioso aunque un punto de acierto en el tiro le hubiera hecho redondear mejores números (siete puntos y siete rebotes). Y también Alberto Díaz. Y Germán Gabriel, que jugó sus últimos minutos con la camiseta del Unicaja. No se puede asegurar que nunca más después de sus cuatro regresos anteriores. Pero la ovación del Carpena se la lleva para casa. La honestidad de renunciar a un contrato por un año y medio garantizado en un club como el Unicaja porque quiere sentirse de verdad protagonista es un hecho que el propio público del Carpena le valoró con una ovación cuando fue retirado a falta de 20 segundos. Le acompañaron gritos de MVP. Y así, con 30 puntos de ventaja, se llegó al final para un notable Unicaja, en el camino de la regularidad.

Ficha técnica:

89 - Unicaja (23+20+22+24): Markovic (13), Jackson (-), Kuzminskas (8) Suárez (6), Hendrix (13) -cinco inicial-, Nedovic (15), Díaz (5), Vázquez (6), Thomas (2), Díez (7), Gabriel (5) y Smith (9).

59 - Movistar Estudiantes (13+12+11+23): Fernández (5), Mitchell (12), Hernangómez (5), Thomas (4), Rey (5) -cinco inicial-, Bircevic (6), Vicedo (5), Martín (8) y Salgado (9).

Árbitros: Bultó, Guirao y Martínez Díez. Sin eliminados. Señalaron una técnica al visitante Brandon Thomas (m.26), por simular una falta personal.

Incidencias: Partido correspondiente a la octava jornada de la Liga Endesa ACB, disputado en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena ante unos 7.000 espectadores.