Benicio del Toro se enfrentó a tres horas diarias de maquillaje y vestuario para encarnar en la gran pantalla a El hombre lobo, película que se estrena ahora en España, y con la que el actor y además productor ha querido rendir homenaje al filme clásico de terror de 1941. Emily Blunt, Anthony Hopkins y Hugo Weaving completan el reparto de la cinta, que moderniza al mito del licántropo y agrega a la trama más sangre, vísceras y violencia.

El portorriqueño, que recientemente presentó el filme en Madrid junto a Emily Blunt, afirma que hombres lobo los hay en todas partes y Hollywood no se escapa de ellos. "En Hollywood, como en todas partes, hay hombres lobo y monstruos de todo tipo, que muerden de diferente manera, robando o mintiendo", considera el actor, quien cree que el hombre lobo de la ficción quizá sea "más buena persona que los que hay sueltos por ahí".

El mayor miedo que sintió al encarnar a este personaje fue "parecer un personaje tonto". "Cuando actúo, mi mayor temor es parecer un personaje tonto. Es un miedo con cada personaje y que tenemos los actores por parecer de carne y hueso y no algo ficticio", explica.

Al enfrentarse a un personaje que requería tantas horas de maquillaje, el actor se dio cuenta de que tenía que "sobreactuar". "Vi todas las películas sobre hombres lobo, para ver el empeño de cada actor en mantenerse detrás del maquillaje y que se viera al ser humano que hay debajo, no sólo al monstruo", detalla.

Del Toro da vida en esta producción, inspirada en la clásica película de Universal, a Lawrence Talbot, un noble que regresa a la casa familiar después de que la policía haya encontrado a su hermano muerto, brutalmente asesinado. Allí se reencuentra con su padre (Anthony Hopkins) y conoce a la prometida de su hermano, Gwen Conliffe (Blunt). Talbot, en la búsqueda del culpable, descubrirá con horror el destino que le espera, tras ser mordido por una supuesta alimaña. Con la llegada de la luna llena comprobará en sus carnes la maldición de los hombres lobo. Sólo el amor de Gwen podrá salvarle de un trágico destino.

Las dificultades para llevar a cabo esta producción fueron numerosas, incluso hubo un cambio en la dirección y Joe Johnson (Parque Jurásico III, Océanos de fuego) fue quien acabó afrontando el rodaje. Respecto al éxito que pueda alcanzar este clásico en los cines, al competir con filmes que utilizan nuevas tecnologías, como es el caso de la taquillera Avatar, que Del Toro todavía no ha visto, este fan de personajes como Frankenstein, Drácula, King Kong y otros monstruos, considera que quizá en 3D El hombre lobo fuera "más fantástica". Pero los efectos digitales nunca podrán "opacar", en su opinión, a la "sutileza de los actores, mientras sean seres humanos quienes vean las películas".

Sobre la crisis y los problemas para levantar ahora películas en Hollywood, Del Toro afirma que "sí se nota la crisis económica y los proyectos no salen. Pero donde hay voluntad, se puede", subraya el actor, miembro de la Academia de Cine de Hollywood, que apuesta por el actor Jeff Bridges en las quinielas para llevarse el Oscar este año.

A la gala de entrega de los Oscar y de otros premios también se refiere Emily Blunt, quien dice que ceremonias como éstas hacen parecer que "la industria del cine siempre tiene que felicitarse", cuando hay gente en el mundo con grandes problemas. "Te pones un vestido bonito y ves a tus amigos. Es divertido, pero pensar sólo en los premios hace perder la magia de la profesión de actor", señala la actriz, laureada por su actuación en El diablo viste de Prada, en la que hizo un papel que "gustó a todos" pero del que ella quiso desprenderse en otros filmes para no encasillarse.

Blunt, quien nunca pensó en dedicarse a la actuación y llegó a la industria del celuloide "por casualidad", sí afirma que ahora adora su trabajo. En concreto, sobre El hombre lobo dice que le atrajo que la historia fuera "algo metafórica y con un destino cruel". "Es una historia tipo mitología griega, donde hay un elemento trágico y sabes que alguien va a morir, pero que también tiene una historia romántica y no sólo sangre y entrañas. Trabajar con género de terror ha sido algo nuevo para mí y me ha gustado", concluye.