Emplear términos bélicos para referirse al panorama que le espera a un equipo es un tópico bastante manido en esto del mundo del fútbol. Sin embargo, esta actuación sí que encierra una realidad: el reconocimiento de que la situación no es la que se esperaba o desea. Es justo lo que le ocurre al Málaga, representado ayer en las palabras de Duda, su jugador más desequilibrante. "Sabemos que hasta el final esto va a ser una guerra", dijo el luso, quien, obviamente, considera clave ganar en casa: "Siempre queremos ganar y el domingo salió todo al revés. Lo importante es seguir en buena línea en nuestra casa y conseguir los tres puntos el domingo. Si conseguimos los seis puntos [los siguientes rivales son el Deportivo y el Mallorca en casa] es un paso definitivo de cara a la permanencia, que pasa por los partidos que tenemos en casa con adversarios directos. Nos da igual mirar a los demás, sigue dependiendo de nosotros mismos y estamos a cuatro victorias de conseguir la permanencia matemáticamente".

En la retina de todos aún permanece el encuentro ante el Levante. Una derrota de la que el zurdo prefiere sacar conclusiones para no repetirla: "Empezamos el partido con un 2-0 y así es muy difícil remontar, intentamos dar todo y no lo conseguimos, y nada, felicitar al Levante. Lo importante es que sepamos corregir los errores del domingo y que no vuelva a pasar el próximo partido. Si hubiéramos ganado no hablaríamos del parón, lo importante es hacer todo el domingo y sacar los tres puntos".

El próximo visitante se resiste últimamente a los blanquiazules. Hace once años de la última victoria, aunque el Deportivo tampoco están en una situación desahogada: "Es un equipo que está ahí, sabemos la calidad y los jugadores que tienen, se la está jugando como nosotros; a trabajar bien, y estudiar al equipo que tenemos delante para que el domingo no tengamos ninguna sorpresa en nuestra casa".

De quien no tiene la menor duda el portugués es de la grada: "El año pasado nos apoyaron hasta el último partido y quedando ocho partidos no hay que arrojar la toalla. Seguro que el domingo estarán con nosotros. Tenemos que jugar nuestra liga y pensar en el domingo. Hasta el final va a haber mucha pelea".

Una de las preocupaciones del aficionado blanquiazul es el estado físico de Duda, de quien saben de su importancia en el equipo. El luso, tranquiliza: "Me encuentro bien. Poco a poco voy volviendo al físico que a mí me gusta. Vengo de una lesión y espero terminar bien la temporada y conseguir el objetivo. Intento hacer lo mejor posible, para mí y el equipo, que es lo más importante, y entre todos conseguir el objetivo de la permanencia. Si siguen hablando de mi nombre es que estoy haciendo bien mi trabajo".