Justo una semana después de que Bernd Schuster le diera un tirito público a Camacho, llegó el turno de réplica para el zaragozano. Como era de esperar, el mediocampista señaló su malestar por el mensaje del técnico, que en ningún momento se podía imaginar. "Me dolió, no te voy a engañar, a todo jugador no jugar le duele. No me esperaba esto. No son palabras bonitas. Al final te comes el coco con muchas cosas. Hay que trabajar, no es momento de individualizar y sí de estar unidos. Yo no tengo ninguna queja en Málaga, tengo el cariño de la gente, porque vivimos muchas cosas bonitas juntos y eso se agradece. No juegas, pero tienes el cariño de la gente en la calle y te quieran como el que más, eso reconforta", señaló en Deportes Cope.

El entrenador alemán había afirmado en la previa del choque en Granada que Camacho jugó el año pasado por la lesión de un compañero. A eso sí replicó el ex del Atlético de Madrid: "No he hablado con Schuster, son declaraciones que ha hecho. Puedo estar de acuerdo o no, yo sólo digo que estoy muy orgulloso del año pasado. Tuve épocas en que jugué con Toulalan, con Iturra o incluso solo. Nadie olvidará ese año, me siento muy orgulloso".

Un trance que no tiene nada que ver con los planes que la entidad había trazado por él tras su gran año, con muchos minutos en el Málaga y saliendo campeón de la Eurocopa sub 21. "No se lo que piensa él [Schuster] de mí, no estoy en su cabeza. Es verdad que lo que me trasmitió el club es que iba a ser muy importante en el equipo; a día de hoy esa importancia no es suficiente para mí, trabajaré hasta que pueda, para cambiar su idea", indicó.

Eso sí, aunque intentó restar dramatismo acerca de una presunta salida, Ignacio Camacho no terminó de encajar la puerta. "No quiero pensar en una salida y no creo que sea el momento a día de hoy, ahora es el momento de trabajar y de no individualizar. En enero ya diré si se da, ahora no es momento para nadie", insistió el centrocampista, que señaló que en verano tuvo "cosas", pero que finalmente optó por quedarse en el Málaga. "Era algo bueno para mí y el club y no me arrepiento de esa decisión, nunca es bueno mirar al pasado", apostilló.