Se esperaba partido duro en Melilla, donde el Estepona volvió a estrellarse ante un Casino del Real que le ha sacado cuatro puntos y dos empates este curso. Se le ha enconado el conjunto melillense al plantel de Rafa Gil, que llegó a adelantarse en el marcador desde los once metros gracias al buen hacer de Scifo. Los esteponeros, conscientes de la importancia de los puntos en juego, salieron al campo con mucha más intensidad que su rival, y consiguieron ponerse por delante a la media hora de partido. El gol a favor cambió la dinámica de un partido igualado, a pesar del tenue dominio de los malagueños.

El Casino es un rival que difícilmente se rinde, y se mantuvo en el partido hasta el descanso. Tras el paso por vestuarios, los melillenses pusieron toda la carne en el asador en busca del empate. Los rojillos dispusieron de más espacios para intentar matar a la contra, pero Manolo, que llevaba siete minutos en el campo, igualó la contienda a falta de 15 para el final. El último cuarto de hora fue de puro desmelene local y de aguante estoico del líder, que volvió a tropezar con la misma piedra de la primera vuelta, y ve peligrar su liderato de nuevo.