Manchester City y Manchester United ampliaron las distancias respecto a sus perseguidores y dejaron la Premier casi encarrilada a un duelo entre ambos tras sendas victorias ante Tottenham y Arsenal, dos de los enemigos más peligrosos del campeonato.

Un gol de penalti del italiano Mario Balotelli en el minuto 95 salvó los tres puntos para el Manchester City frente al equipo revelación de la liga inglesa esta temporada, el Tottenham Hotspur (3-2). Los spurs, que habían igualado un 2-0 en contra en la segunda parte, vieron cómo se les escapaba en el último suspiro un punto que parecía asegurado en el feudo del líder de la Premier.

Una gran jugada de Silva motivó que Nasri adelantara a los suyos en el segundo tiempo, poco antes de que Lescott ampliara diferencias tras un saque de esquina. Los de Mancini encarrilaban un choque que cambiaría en cinco minutos, lo que tardó el Tottenham en poner el empate gracias a los goles de Defoe y Bale.

Cuando todo parecía destinado a terminar con tablas en un intenso encuentro, Defoe tuvo la opción de dar los tres puntos a los londinenses, pero fue Balotelli el que transformó un penalti que resultó decisivo en el descuento.

El Manchester United se llevó con autoridad los tres puntos del Emirates Stadium (1-2) ante un Arsenal que creyó poder remontar el encuentro con un gol del holandés Robin van Persie en la segunda parte. Los diablos rojos, que dominaron desde el inicio el clásico del fútbol inglés, se adelantaron al final del primer tiempo con un tanto del ecuatoriano Antonio Valencia, y demostraron su oficio a diez minutos del final con un gol del inglés Danny Welbeck que les devolvió la ventaja tras el tanto de Van Persie en el minuto 70.

La victoria permite a los de Alex Ferguson mantenerse a tres puntos de sus vecinos del Manchester City, que lideran la Premier con 54 puntos tras vencer ayer.