El Unicaja seguirá contando con un equipo filial en la categoría de plata del baloncesto español. La experiencia iniciada en 2008 (hasta entonces, el Clínicas Rincón sólo era un equipo vinculado) tendrá continuidad la próxima temporada pese a las dudas que se habían planteado en el seno de la entidad cajista. El proyecto ha corrido peligro debido a los recortes presupuestarios que el club de Los Guindos planea para el próximo curso, pero finalmente seguirá vigente. Lo hará, eso sí, con menos dinero.

El alma máter del Clínicas, Manolo Rincón, seguirá aportando una importante inyección económica y el club cajista seguirá disponiendo de un magnífico taller en el que ir dando forma a sus jóvenes promesas. El ejemplo de esta última campaña vale para comprobar las ventajas de disponer de un filial en una categoría semi-profesional en la que se acelera todo el proceso de introducción a la élite competitiva. Y es que el Instituto Oftalmológico Clínicas Rincón ha conseguido salvar la categoría a la par que cuatro de sus jugadores han acabado haciéndose un sitio en la ACB.

Augusto Lima y Rafa Freire, que en un principio contaban para el primer equipo, ayudan ahora al CB Granada a lograr la permanencia en la máxima categoría, mientras que Nedzad Sinanovic y Pablo Almazán han aprovechado la salida de los brasileños para ganarse la confianza de Chus Mateo y convertirse en jugadores del Unicaja con visos de continuidad. Además, Paco Aurioles es ahora técnico asistente del primer equipo. Toda una cadena de producción que, pese a las dudas iniciales, tendrá continuidad el próximo año.