Balonmano l Campeonato de Europa

España se despide de las medallas

  • Los de Pastor desperdiciaron su última posesión con 26-26 en el marcador

España perdió todas sus opciones de acceder a las semifinales del Campeonato de Europa, tras caer por 26-27 ante Suecia, que se llevó el partido gracias a un gol de Kallmann con el tiempo a cero.

Si en el encuentro ante Francia la selección española dispuso de un último balón para empatar, ante los suecos se produjo la misma situación, aunque con un resultado todavía más doloroso, pues la última posesión se jugaba para ganar y acabó concediendo un último contragolpe después del fallo de Mariano Ortega cuando los de Juan Carlos Pastor jugaban al todo o nada con el portero-jugador para paliar la inferioridad numérica con la que afrontó el minuto final.

Un duro castigo para un conjunto que pareció en los minutos iniciales haber superado el batacazo que supuso su incapacidad para arrancar un empate al gigante francés, con una ordenada defensa, que como ha ocurrido muchas veces a lo largo del campeonato no encontró en ataque continuidad. El pequeño despegue del conjunto sueco se produjo como consecuencia de dos precipitaciones ofensivas. Tan sólo bastó que el ataque recuperase el acierto y la calma, para que la defensa, ya con Garabaya, Asier Antonio e Iker Romero en el eje central, volviese a mostrar la solidez inicial. Entre la combinación entre los errores ofensivos y las brillantes acciones defensivas transcurrió el primer período, con España haciendo la goma en el marcador.

Con Hombrados como líder, España parecía en disposición de abrir al arranque de la segunda mitad una brecha casi definitiva (19-16), pero cuando todo parecía más sencillo una vez más la precipitación y las pérdidas de balón permitieron a los suecos meterse otra vez de lleno en el partido (21-21) pasado el ecuador del segundo periodo, lo que obligaba nuevamente a España a empezar de cero, comenzando por la defensa, donde nuevamente Hombrados fue todo un seguro de vida, y continuando en ataque, donde Garabaya adquirió un inesperado protagonismo.

Estos argumentos no fueron suficientes para zafarse de los escandinavos, que encontraron en los lanzamientos en circulación del jugador del Ciudad Real Kallman, la mejor forma de subsanar la sequía goleadora de su gran estrella, Kim Andersson. De la mano del extremo, y tras una exclusión de Garabaya, Suecia se situó por delante en el marcador (24-26). La recuperación española llegó de la mano de Juanín García, quien, con un veloz contragolpe, devolvió de nuevo las tablas (26-26).

El drama, sin embargo, todavía estaba por llegar. Primero fue la exclusión de Alberto Entrerríos, que obligó a España a jugar el último minuto y cuarenta y cinco segundos en inferioridad, y aunque la parada de Hombrados a lanzamiento de penalti de Andersson pareció poner a la selección en disposición de ganar, todo se vino abajo, como el día de Francia, con una fallida jugada final.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios