La FIBA solicitó ayer los vídeos de la pelea que protagonizaron el jueves en un partido amistoso las selecciones de Grecia y Serbia para estudiar posibles sanciones que podrían afectar a ambos equipos de cara al inminente Mundial.

"No estamos felices con lo que sucedió. La FIBA condena la violencia dentro y fuera de la cancha", dijo el portavoz de la Federación Internacional de Baloncesto, Florian Wanninger. "En un caso similar impusimos duras sanciones. El catálogo de condenas en estos casos va desde una multa económica hasta una suspensión de varios partidos", agregó.

Grecia y Serbia se enzarzaron en una brutal pelea en la que se lanzaron sillas durante un amistoso en Atenas. El serbio Nenad Krstic fue puesto en libertad ayer tras pasar unas horas arrestado acusado de vandalismo.

Krstic, jugador de los Oklahoma Thunder de la NBA, arrojó una silla a un rival durante la pelea, por lo que fue detenido. Rápidamente quedó en libertad, después de que la Fiscalía de Atenas le acusara de vandalismo, según informaba ayer la prensa griega.

La batalla la desencadenaron a falta de 2:20 minutos para el final del partido el serbio Milos Teodosic y el griego Antonis Fotsis. De ahí en adelante, tres minutos de pelea entre la mayor parte de los componentes de ambos equipos.

Krstic levantó una silla y la lanzó a los griegos, golpeando al pivot Ioannis Bourousis. Éste, que saltó a la cancha para la pelea pese a que no podía jugar por lesión, sangró detrás de la oreja como consecuencia del golpe. Luego confirmó que no presentaría cargos. Los técnicos de ambas selecciones y los asistentes, mientras tanto, trataron en vano de separar a los jugadores.

En 2009, el letón Kaspars Kambala (ex jugador del Real Madrid, entre otros) fue sancionado cuatro partidos por FIBA Europa por golpear al alemán Steffen Hamann en el Europeo de Polonia. Además, tuvo que pagar una multa de 6.000 euros.