Siempre se ha dicho de los equipos dirigidos por Antonio Tapia que su base se cimenta en el compacto engranaje defensivo y en el orden de sus líneas. Transcurridas ya cinco jornadas de Liga, el técnico de Baena ya ha dado pistas sobre el orden de sus preferencias y la defensa, a tenor de los números, sigue siendo la línea que menos dudas ofrece al técnico blanquiazul. De hecho, Jesús Gámez, Weligton y el reconvertido lateral izquierdo Calleja se han erigido en las tres piezas intocables para Tapia.

El lateral derecho, que va a más en su juego y que ya roza el nivel que mostró en las dos últimas temporadas; el central brasileño, el verdadero líder de la zaga; y el polivalente zurdo madrileño han jugado los 450 minutos de Liga transcurridos hasta el momento, un registro al que sólo se acercan Baha (409) y Duda (401). Pablo Barros, fijo en los últimos cuatro partidos, podría haber formado parte de ese selecto grupo si hubiera debutado ante el Atlético de Madrid. Desde ese encuentro, el jugador propiedad del Zaragoza es otro de los intocables en las alineaciones de Tapia.

En defensa, la única disyuntiva seria a la que se ha tenido que enfrentar Tapia ha sido la duda entre Cuadrado y Helder. Tras los tres primeros partidos (Atlético de Madrid, Athletic de Bilbao y Almería) en los que el central salmantino jugó todos los minutos, el baenense se decantó, sorpresivamente, por el portugués en el choque ante el Valencia. Desde ese encuentro, el jugador criado en Barcelona no ha entrado ni en las convocatorias. En la izquierda, los problemas musculares de Nacho han minimizado su rol en beneficio de Calleja.

En la medular, además de Pablo Barros, Miguel Ángel y Lolo se están disputando la otra plaza en el doble pivote. Tras la expulsión del catalán ante el Almería, el onubense le ha ganado terreno y tras su suplencia ante el Athletic y el cuadro almeriense, ante el Valencia volvió a la titularidad. En las alas, Eliseu ha ido ganando minutos en la izquierda y Duda, en la derecha, es otro de los fijos para Tapia. En ataque, las lesiones de Salva y de Luque han provocado que, además de Baha, Adrián sea ahora indispensable.

En el extremo opuesto, Manolo y Goitia, por decisión técnica, y los lesionados Rossato y Pere Martí son los únicos cuatro futbolistas de la plantilla que todavía no se han estrenado con Tapia, que ha utilizado veinte futbolistas en cinco partidos.