La salida de Carlos Kameni del Espanyol al fin está a punto de desbloquearse. Llevaba varias semanas enquistado el tema porque el Málaga no estaba dispuesto a pagar un traspaso al conjunto catalán, que aparte de librarse de su alta ficha quería un pellizco con el que buscar un delantero en el mercado de invierno. Pero ayer se reactivaron los contactos, que en cuestión de horas están llamados a fructificar.

El propio club barcelonés lo avanzó ayer a través de un comunicado público en su página web: "En las últimas horas, el Málaga CF ha intensificado los contactos con el RCD Espanyol para negociar el traspaso de Carlos Kameni. El club andaluz ha manifestado al Espanyol la clara voluntad de hacerse con los servicios del portero camerunés y, por este motivo, ambas entidades han abierto negociaciones. Pese a todo, quedan algunos detalles aún por cerrar y eso, en estos momentos, hace que no se pueda dar por cerrada la operación".

Finalmente, el equipo de Martiricos abonará una pequeña cantidad al Espanyol, por debajo del millón de euros. El camerunés siempre ha sido la opción más a tiro junto a la de Palop, pues ambos estaban llamados a salir en cantidades asequibles. Fernando Hierro lo negó en Canal + con una media sonrisa: "Son rumores". Se verá.

Pero en los últimos días había más frentes abiertos, como el del portero del Glasgow Rangers Allan McGregor. Internacional con Escocia y a punto de cumplir 30 años, dirigentes de Martiricos habían hablado con sus homólogos para tantear su salida, que era bastante complicada.

Ante esa tesitura, y con la nueva lesión de ayer de Rubén, una "artritis postraumática en la articulación acromioclavicular izquierda", según aclaró el parte médico blanquiazul, la entidad de Martiricos agilizó los contactos con Kameni para así traer una competencia más alta a Caballero. Mientras se consuma su llegada, anoche Pol fue el que se sentó como portero suplente. Rubén sabrá hoy el alcance de su dolencia tras ser sometido a pruebas.