El Nápoles se impuso 3-1 al Chelsea gracias a los goles del argentino Lavezzi y del uruguayo Cavani, con lo que mantiene vivo el sueño europeo tras remontar un 0-1 y firmar una contundente victoria ante los de Villas-Boas, que pese a no poder contar con Terry recuperó a Drogba, después de sus compromisos en la Copa de África, y dejó en el banquillo a Fernando Torres.

El encargado de abrir el marcador fue Mata, que en el minuto 27 aprovechó un mal despeje de Cannavaro dentro del área y adelantó a su equipo. Los italianos acusaron el golpe y parecieron perder convicción, pero en el minuto 38 el partido registró un giro con un gol de Lavezzi tras una asistencia de Cavani desde la banda izquierda.

El gol dio alas al Nápoles, que recuperó la confianza y se vio recompensado con un nuevo tanto en el minuto 46, esta vez de Cavani, que remató bajo la portería un pase cruzado desde la banda derecha del suizo Inler con el antebrzo.

Tras el descanso, el Chelsea salió con ganas y abrió el juego, aunque el Nápoles no se relajó y mantuvo la presión sobre sus adversarios. Así, transcurridos veinte minutos el esquema se repetía para el conjunto napolitano y Lavezzi conseguía un doblete, de nuevo gracias a un pase de Cavani.

Un choque en el que el resultado podría haber sido incluso más arrollador, si Cole no hubiera logrado despejar en la línea de portería un balón a favor del Nápoles a tan sólo nueve minutos del final.