El Real Madrid perdió la ocasión de afirmarse como potencia con aspiraciones en la Euroliga en la pista del Lottomatica de Roma, donde el equipo dirigido desde los despachos por Dejan Bodiroga pudo con el Panathinaikos, actual campeón europeo, y ahora ha resucitado gracias a la inyección de moral lograda ante los blancos.
El Madrid malgasta munición en Roma
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Suma su tercera derrota y pierde terreno respecto a Panathinaikos y Barça
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