Ayer terminó la segunda semana de entrenamientos desde que arrancó la pretemporada. Marcada por la ausencia de muchos miembros del primer equipo por lesiones o vacaciones y un fuerte calor que ha dejado casi exaustos a los jugadores de Javi Gracia, que además han tenido que completar dobles sesiones que algunos días se han hecho interminables. Hoy tiene lugar un muy deseado día de descanso; mañana comenzará la primera gran semana intensa.

Básicamente, porque comienzan a aparecer los partidos, porque el equipo se traslada a un nuevo lugar de trabajo y porque progresivamente el técnico navarro irá recuperando elementos profesionales en detrimento de los canteranos que estos días pueblan las sesiones de trabajo.

El próximo jueves, en una relación que tendrá que terminar de completar Javi Gracia estos días, la expedición blanquiazul trasladará su escenario de trabajo a Alemania. Allí jugarán los primeros bolos del verano. Serán el viernes 17 y el domingo 19 frente al Karlsruher y el Friburgo, en sus respectivos estadios. La oportunidad para ver ya a algunas de las nuevas incorporaciones en acción.

Aunque es el gran atractivo para el aficionado, Javi Gracia espera que la carga de trabajo no siga causando mellas. Ya son varios los tocados del verano. Por encima de todos ellos, Ignacio Camacho, que tuvo que volver a pasar por el quirófano por la reproducción de molestias ocasionadas por su pubalgia. Ayer se personó en el estadio y estuvo observando el trabajo completado por sus compañeros. El maño se tendrá que quedar por Málaga para seguir recuperándose a un ritmo menor que el que llevarán sus compañeros.

A Alemania se marchará tocado Boka, quien tras pasar también por una pequeña intervención en el pie derecho continúa integrándose paulatinamente al trabajo en grupo. Tanto él como Tissone, este por una sobrecarga en el cuádriceps izquierdo, se ejercitaron al margen ayer.