Su semblante tras el partido era un poema. Abatido, triste y preocupado, Chus Mateo intentó desgranar las claves de la dolorosa derrota de su equipo ante el Gran Canaria. Mala defensa, poca intensidad en el rebote y nulo acierto en el tiro fueron, en su opinión, los grandes defectos de los suyos.

"El partido había empezado con buena dinámica para nosotros, pero se ha tornado en el segundo cuarto en precipitación, en conceder constantemente segundas opciones para ellos. Al final nos han hecho 67 tiros a canasta, algo que me parece una barbaridad. Hemos dado muchísimas segundas opciones y nos han ganado en la batalla del cuerpo a cuerpo. En lo que era uno contra uno y cierre del rebote, ellos han tenido muchísimas más ganas. Esa ha sido la clave. En ataque hemos tenido un día aciago, con demasiados tiros y muy pocos pases. En el segundo tiempo sólo hemos dado una asistencia y hasta ahora éramos el segundo mejor equipo en cuanto a anotación y asistencias", resumió el técnico cajista.

El Gran Canaria dejó a su equipo en 49 puntos. Gran defensa canaria, pero según el madrileño también demasiadas facilidades cajistas: "El Gran Canaria es un equipo que siempre juega con mucha intensidad, se caracteriza por ello y creo que siempre ha sido una tónica cuando he visitado este campo. Pero creo que nosotros hemos dado también bastantes facilidades a partir del segundo cuarto, jugando con un ritmo no adecuado para dar opción a que Gran Canaria volviera al partido. Al final, se han llevado el gato al agua con merecimiento".

Pero lo que más le preocupa a Mateo es el estado emocional de su equipo después de encadenar, por primera vez, cuatro derrotas seguidas. "Evidentemente hoy [por ayer] no hemos desarrollado el juego que necesitábamos. Debemos recuperarnos mentalmente lo antes posible. Estamos atravesando un bache, no somos el equipo que comenzó la temporada. Depende de nosotros, de nuestro trabajo y nuestra mentalidad, de si somos capaces de ser duros ahora y no venirnos abajo por muy mal que estemos jugando. Sólo puedo pedir perdón por el juego que hemos desarrollado, que no creo que haya sido un buen espectáculo de ver", reconoció el entrenador.