Tiago Gomes está a un solo paso de cerrar su llegada al Málaga. El presidente del club blanquiazul, Fernando Sanz, confirmó ayer a este periódico que las negociaciones "están muy avanzadas" y que sólo la "complejidad de la operación" impidió que ayer se cerrara definitivamente. "Espero que Tiago firme mañana [por hoy]. Es uno de los jugadores con mayor proyección del mercado portugués y un centrocampista de una indudable calidad", dijo Sanz, que confirmó todos los detalles del contrato. El jugador rubricaría un acuerdo que contempla una cesión por cinco temporadas y al final de cada campaña el club de Martiricos tendría la posibilidad de ejecutar una opción de compra. "No tendríamos que pagar nada por él y sólo contemplamos una cesión gratuita", dijo Sanz.

Antes, según informó el presidente del Estrella de Amadora, Antonio Oliveira, se debería producir un paso intermedio. A juicio del mandatario luso, su club ingresaría una cantidad económica, que no supo precisar, por la transacción. "Tiago es uno de los mayores activos de este club y nosotros estamos pasando por una situación económica muy delicada", aseguró Oliveira, que negó que el Málaga se hiciera cargo del montante económico de la operación: "Sería una empresa [tampoco quiso precisar su nombre] la que se haría con los derechos del jugador", señaló el presidente del Estrella de Amadora, que añadió que luego se lo cedería al Málaga. Este extremo fue matizado por Sanz, que defendió que el jugador vendría a Málaga libre de carga por el proceso concursal en el que está sometido el club. En lo que sí coincidieron ambos presidentes es en que la operación está a punto de cerrarse. "Soy optimista y si Tiago llega al Málaga será un gran club para su proyección", dijo Oliveira. Es previsible, en cualquier caso, que las diferencias económicas existentes ayer puedan resolverse hoy, lo que permitirá la inmediata incorporación del futbolista.

Todo hacía presagiar que el jugador iba a estampar ayer la rúbrica de su nuevo contrato. Sobre todo cuando a primera hora de la mañana el mediocentro portugués pasó el pertinente reconocimiento médico en la Clínica Rincón. Posteriormente, al filo del mediodía, se desplazó a la Comisaría de Málaga para solucionar los trámites derivados de su cambio de residencia. Minutos más tarde, se dirigió, junto a su representante, Sergio Ferro, a La Rosaleda para conocer las instalaciones.

La lentitud en los progresos de la operación estriba en que los derechos del jugador están repartidos entre su club, que posee el 30 por ciento, y una empresa que regenta su representante. "Ese factor está dilatando las negociaciones", dijo Sanz. Por su parte, Ferro -el jugador tiene prohibido hablar con los medios de comunicación- indicó que la operación depende de algunas variantes: "No puedo precisar cuáles para no ponerla en peligro, pero somos optimistas".

Tanto el jugador como su agente volvieron ayer a pernoctar en Málaga y hoy se espera que se desplacen a La Rosaleda para cerrar los detalles de una operación con la que el Málaga cumpliría con los deseos de reforzar una de las posiciones más demandadas por Muñiz.