Liga de Campeones

El Sevilla, entre la ilusión y la nieve

  • Arranca en Moscú la ida de los octavos de final para los de Jiménez sobre un césped artificial

La ilusión del CSKA de Moscú y el Sevilla por hacer historia en la Liga de Campeones enmarca la ida de esta eliminatoria de octavos de final, que arranca hoy en el estadio Luzhnikí ruso con un terreno de juego de césped artificial y bajo unas previsiones de intenso frío y de nieve.

El equipo sevillista, que fue recibido en Moscú con doce grados bajo cero, confía en superar la ronda y pasar por primera vez a los cuartos de esta máxima competición continental bajo su actual denominación, en la que debutó hace dos campañas y cayó eliminado por el Fenerbahçe en esta ronda después de superar la fase previa de liguilla.

Los hombres de Manolo Jiménez, después de pasar por un bache de juego y resultados, se presentan en el choque con el rumbo enderezado. En este partido, que el equipo preparó domingo y lunes sobre la hierba sintética de su ciudad deportiva, no estará el goleador brasileño Luis Fabiano ni Diego Capel, ambos lesionados. Sí vuelve Kanouté, quien debido a una elongación muscular no estuvo el pasado sábado en Mallorca. Siguen de baja por problemas físicos tres defensas, Konko, Squillaci y Sergio Sánchez, además de De Mul.

Uno de los objetivos sevillistas es marcar por el valor doble de los goles a domicilio. Frente a ellos, el CSKA Moscú intentará hacer buena la motivación de jugar por primera vez los octavos de final de la Liga de Campeones, aunque el equipo del ejército ruso no disputa un partido oficial desde diciembre por el parón invernal. "Descansados y frescos, pero sin ritmo de juego", así definió a sus jugadores el técnico del CSKA, el ruso Leonid Slutski, que sustituyó el octubre pasado al ex sevillista y ex madridista Juande Ramos, destituido por los malos resultados al frente de la dirección técnica de los rusos.

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