El Sevilla se juega el liderato del Grupo H de la Liga de Campeones ante un rival accesible, el Slavia de Praga, al que ya venció en casa por 4-2 y que ahora tampoco debe ser obstáculo para que los de Manolo Jiménez, con la clasificación para octavos de final en el bolsillo, encaren la siguiente fase con posibilidades ciertas de seguir vivos.

Los nervionenses encabezan su grupo con 12 puntos, mientras que el segundo clasificado, el Arsenal, tiene 10 puntos tras caer en el Pizjuán hace dos semanas por 3-1. De este modo, la victoria en Praga certificaría ese liderato, aunque en caso de no vencer serían los ingleses quienes tendrían esa posibilidad en su mano, ya que se miden al débil Steaua.

El Sevilla viene de obtener un triunfo balsámico (3-1) en Liga a costa del Murcia, aunque lo cierto es que los rojiblancos siguen sin jugar como se esperaba y dejan mucho que desear en defensa. Ésta será, sin duda, una de las principales preocupaciones de Jiménez, que no acierta a reconducir situaciones como las jugadas a balón parado.

Precisamente bajo el arco le ha surgido un problema al Sevilla de última hora con la baja de Palop, lesionado frente a los murcianos, y cuyo puesto será ocupado por el debutante De Sanctis. El canterano Vargas estará en el banquillo.

Tampoco han viajado Kerzhakov ni Adriano, aquejados de molestias físicas, y Keita, sancionado, mientras que Fazio se queda fuera de la lista por decisión técnica y De Mul es baja de última hora tras resentirse de los problemas físicos que arrastraba. Su lugar en la convocatoria lo ha ocupado el canterano Alfaro.

De todos modos, dado que el Sevilla ha recuperado a Dragutinovic y Kanouté y sigue disponiendo del enrachado Luis Fabiano, lo lógico es que la visita a Praga se salde de modo positivo y suponga un jalón más en la recuperación anímica del once nervionense.

El Slavia jugará el partido sin posibilidades de pasar a la siguiente fase y con plaza en la UEFA asegurada. Los pupilos de Karel Jarolim son un equipo joven, sin estrellas y que mandan en su competición nacional, la Liga Gambrinus, donde son primeros a cinco puntos de distancia del Teplice. Además, conviene recordar que el cuadro checo está imbatido en casa en esta edición de la Liga de Campeones.