El Tenerife y el Elche perdieron ayer muchas de sus posibilidades de engancharse al tren del ascenso después de conseguir un insuficiente empate tras un partido controlado por el conjunto tinerfeño hasta que un polémico penalti sancionado por el colegiado en la recta final permitió a los alicantinos nivelar la contienda.

Fue Manolo Martínez el que en el minuto 37 con una ambiciosa demostración de coraje y tras una jugada individual por el centro de la zaga visitante cedió un franco balón a Nino, para que el goleador rematase a puerta, pero se topó con la acertada salida de Caballero, y tras esta ocasión los locales se posicionaron mejor y pusieron en aprietos el marco de su rival. En una de estas acometidas, justo cuanto el encuentro encaraba ya la recta final de este periodo se produjo una rápida incursión por la banda de Iriome, que con un centro preciso asistió para que Óscar Pérez, libre de marca, de un inapelable disparo enviase el balón a la red ilicitana.

No sólo fueron los levantinos los que salieron totalmente decididos a nivelar el marcador, los tinerfeños tampoco se contentaron con la ventaja, y de nuevo Óscar Pérez tuvo el tanto en sus botas, pero su franco pero débil disparo lo atajó Caballero sin problema alguno en el minuto cincuenta y cuatro.

Ya en la recta final del partido una incursión de Rubén dentro del área fue obstaculizada por Raúl Navas, jugada que fue sancionada con penalti ante la sorpresa de jugadores y aficionados, que se encargó de transformar Cobo para poner el empate en el marcador.