Uno de los damnificados de la última jornada de la fase regular ha sido el Valencia Básket. Cayó en Badalona y se quedó fuera de la Copa del Rey, firmando un fracaso mayúsculo que le costó el puesto a Paco Olmos. El entrenador valenciano fue destituido por la noche y le sustituirá de manera provisional su segundo, Chechu Mulero. El club taronja mira, sin embargo, el mercado de entrenadores y se ha fijado en un viejo conocido de la afición malagueña: Aíto García Reneses.

El ex técnico del Unicaja se encuentra sin equipo desde que saliese de Málaga hace un año. Colabora con la Euroliga pero no ha vuelto a sentarse en un banquillo. En Valencia le tocaría reflotar un equipo con muchos problemas de lesiones, pero con un arsenal suficiente como para conseguir remontar el vuelo. La eliminación copera del Unicaja el año pasado fue el desencadenante de su destitución al frente del banquillo cajista. Ahora, la eliminación copera del Valencia puede devolverle a los banquillos un año después. El 26 de febrero podría volver al Carpena.