Borja Vivas continúa con su puesta a punto de cara al Campeonato de España en pista cubierta que se celebra en dos semanas en el Velódromo Luis Puig, mismo escenario donde ayer dio un paso más hacia su objetivo esta temporada: mejorar sus marcas y establecerse en torno a los ansiados 20 metros. El malagueño acabó ayer quinto en la Reunión Internacional Ciudad de Valencia con un tiro de 19,19 metros, el mejor registro español en lo que va de curso al alejarse ocho centímetros más que el conseguido hace una semana en Zaragoza. Vivas cerró un buen concurso, aunque nada pudo hacer ante el polaco Tomasz Majewski, que venció con 19,93, el estadounidense Dan Tylor, segundo con 19,71, y el cubano Carlos Veliz, tercero con 19,50.

El del Atletismo Málaga arrancó dubitativo con un lanzamiento de 18,50. Enseguida subió el listón, pues su segundo intento llegó hasta los citados 19,19. Marcas de 19,06 y 18,84 completaron una actuación que el malacitano acabó con dos nulos.

Vivas, aunque no notó las mejores sensaciones, se va "contento" de Valencia. "He mejorado un poquito respecto a Zaragoza, pero he sentido que me faltaba un poco de chispa. Los tres primeros tiros los he hecho con facilidad, pero no he tirado todo lo que me gustaría. Aun así estoy contento, me sirve para ponerme a punto y para acercarme a los 20 metros, que es mi meta, cambiar respecto al año pasado que empecé bien y acabé bastante regular", explicaba el atleta tras competir ayer. El que prefirió no hacerlo en el 1.500 es Álvaro Fernández, que optó por descansar en vista de que el Nacional bajo techo está muy próximo.

Lo más destacable del día lo protagonizó Sergio Sánchez, que consiguió el récord de Europa en los 3.000 metros con un crono de 7:32.51 y puso fin a la plusmarca continental de la distancia, en manos del también español Alberto García desde 2003 en 7:32.98.

El leonés se creció a medida que avanzaba la prueba. Contó con dos liebres: el argentino Carriqueo primero, que hizo los primeros 1.200 metros a un buen ritmo, y el keniata Cheruiyot, que tan sólo aguantó 200 metros, porque Sánchez aumentó el ritmo al ver que peligraba su objetivo. El mediofondista completó los últimos 1.400 metros en solitario.