Muguruza, a octavos.Garbiñe Muguruza arrolló a la letona Anastasija Sevastova (6-4 y 6-2) para clasificarse a los octavos de final del Abierto de Australia. La campeona de Roland Garros, de 23 años, se medirá mañana con la rumana Sorana Cirstea, quien superó por su parte a la estadounidense Alison Riske por 6-2 y 7-6 (7-2). Cirstea ya eliminó en segunda ronda a otra española, Carla Suárez.

"Jugamos un minuto y hablan cinco", se queja con cierto humor Marc López mientras al otro lado de la cancha Rafael Nadal intercambia palabras y más palabras con Toni Nadal y Carlos Moyá. Así son los nuevos entrenamientos del ex número uno, mucho diálogo, mucha derecha y ejercicios distintos a los de antes.

El campeón de 14 Grand Slam incorporó a Moyá a su equipo de trabajo a finales de 2016, su segunda temporada consecutiva sin poder alcanzar la final de ninguno de los cuatro grandes. Ex tenista y ex número uno, Moyá llegó con ideas nuevas, frescas. Y Nadal abrió los oídos.

"Rafa está más receptivo a la hora de escuchar", celebra Toni Nadal, tío y entrenador del actual noveno del mundo desde que era niño. "Está más abierto a escuchar nuevas opiniones", añade tras el entrenamiento del viernes.

En su último entrenamiento antes de medirse esta pasada madrugada al alemán Alexander Zverev -"tiene una gran oportunidad de ser un número uno", dijo Nadal sobre él-, el español de 30 años apura derechas a la línea. Al otro lado de la red están López, con el que ganó el oro olímpico en dobles en Río, y Moyá, que a sus 40 años mantiene una excelente forma.

Dos conos rojos en las esquinas de la cancha marcan la zona donde Moyá y Toni quieren que aterricen las pelotas de Nadal. En el tenis, cuanto más profunda y potente sea una bola, más posibilidades hay de tomar la iniciativa. Ergo, una oportunidad más clara para ganar el punto.

Por esa única razón, hacer más daño con el drive, su mejor golpe, Nadal aumentó el peso de su raqueta en la pretemporada. "Es para poder acelerar un poco más, que la pelota vaya más rápido. Y en líneas generales se está consiguiendo", revela Toni Nadal.

"Hay un detalle fundamental con la llegada de Moyá, que hemos podido cambiar los entrenamientos. Te permite hacer lo que quieras; en cambio, cuando entrenas con otro jugador, tienes que ceñirte a lo que quieran hacer los dos", analiza.

La disponibilidad de Moyá, su técnica y su experiencia ofrecen nuevas perspectivas. "Es muy positivo. Luego la visión de un ex número uno siempre ayuda. Además aporta tranquilidad en momentos puntuales", indica Toni.

El Abierto australiano supone la primera gran prueba para Nadal desde que contrató a Moyá. Junto al tío y Moyá sigue el otro vértice del triángulo técnico, Francis Roig, que no viajó a Australia. Entre los tres se repartirán el calendario de Nadal, aunque en muchos torneos el zurdo estará acompañado por dos de ellos.

"Carlos es amigo mío y quiere lo mejor para mí, conoce mi personalidad y mi juego, y me puede ayudar a mí y al equipo", señaló Nadal al inicio del Abierto.

"Creo que con Francis, Toni y el resto del equipo van a hacer una buena combinación. Se están haciendo las cosas bien. Carlos ama el deporte, ama el tenis y conoce muy bien mi juego. Toni quizás me conoce más que nadie en este mundo dentro de la pista. Pero la combinación va a ser buena".

Nadal lleva sin ganar un Grand Slam desde 2014. Fue además la última vez que superó los cuartos de final en un grande. Ahora, con el oído abierto. pretende volver.