Clasificación suramericana para el Mundial 2010

Los altibajos animan a los modestos

  • El pinchazo de Argentina en Chile y el empate de Brasil en casa aprietan la clasificación por arriba

Brasil aplasta a Venezuela, pero no puede en casa con Colombia; Chile no le llega a portería a Ecuador, pero casi golea a Argentina; los venezolanos resucitan al cuarto día, justo ante los ecuatorianos: por resultados y rendimientos, las eliminatorias suramericanas para el Mundial 2010 parecen haberse vuelto locas de atar.

Sólo Paraguay parece escapar de esta lógica desquiciada, ya que el equipo de Gerardo Martino no se cansa de ganar, y con sus victorias frente a Colombia y Perú quedó diez puntos por encima del equipo que se encuentra en el quinto lugar, Uruguay. En el otro extremo, los peruanos, que además fueron goleados por Bolivia, ratificaron que son la expresión más débil de esta liguilla.

Tras la última doble jornada, concluida el miércoles, ahora llega un receso de cinco meses, bienvenido por casi todos los entrenadores, que aunque casi no dispondrán de tiempo para trabajar con sus jugadores, podrán sentarse a analizar las causas de los altibajos que a falta de ocho jornadas para el cierre de las eliminatorias envuelven a Suramérica en la incertidumbre.

Pero aunque no abundan, también hay certezas. Que el líder Paraguay, con un funcionamiento ajustado y una mentalidad ganadora a toda prueba, ya tiene pie y medio dentro del Mundial. Y que a Kaká, Robinho y compañía definitivamente no le sienta bien jugar en casa: Brasil igualó sus tres últimos partidos en casa, y de nuevo fue despedido con silbidos en el Maracaná tras el 0-0 con Colombia.

Argentina tiene más que preocupada a sus hinchas. Contra Uruguay rompió una abstinencia de cinco partidos sin victorias, aunque no convenció. Y frente a Chile, directamente no existió. El equipo de Alfio Basile no se presenta como un equipo, sino como un conjunto de individualidades de renombre que, además, no resplandecen. La última sacudida se la dio precisamente un argentino, Marcelo Bielsa. Bajo su dirección, y con su marca registrada de fútbol vertical y vertiginoso, Chile parece otro.

Ahora habrá calma hasta finales de marzo, cuando los diez equipos suramericanos echen a andar el último tramo hacia el Mundial de Suráfrica 2010.

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