Dejó Oporto al encuentro de los minutos que le regalaran un billete con destino a Suráfrica. Un regalo que pinta lejano por la poca continuidad de la que ha gozado, aunque sanciones y lesiones le dieron una oportunidad "que no esperaba" ante el Deportivo. Stepanov afirmó ayer que está "flotando" por recobrar sensaciones, pero no escondió el pesar que le produce el haber estado tanto tiempo fuera de los terrenos de juego. Una situación que se dio sin explicación mediante, lo que le duele al tiempo que lo entiende, según dijo el central.

"No es fácil estar lejos tres meses tras jugar ante el Tenerife. Por eso es complicado hacerlo bien cuando has estado entrenando y entrenando sin jugar. Lo di todo, sin presión, pero no es fácil después de tanto tiempo", juzgó un serio Stepanov, que aseguró no conocer los motivos de su desaparición de las convocatorias: "Nadie me explicó nada, pero en el fútbol no suele haber ese tipo de explicaciones, es algo que debe responder el técnico. Me he dedicado a entrenar, que me encanta, aunque para un jugador es doloroso no tener una explicación de por qué no he jugado estos tres meses".

Al serbio, que reconoce que la sanción de Iván le abre las puertas para seguir en el once ante el Racing, le afecta especialmente que no le llame su selección y ver cómo el tren del Mundial se le escapa. "La selección me ha dado mucho. Es triste y desilusionante. Creo que en el fútbol no deben primar los sentimientos, pero es una situación que me duele porque contaba con jugar con mi selección", expuso un Stepanov que no se arrepiente de su fichaje: "Vine en busca de otra vida, otros compañeros y para disfrutar de la mejor liga del mundo. Y tengo que estar satisfecho por ello. Soy fuerte y voy a seguir peleando por hacerme un sitio en este equipo".