El positivo de Juan Dixon ha supuesto una conmoción en su ciudad natal, Baltimore. Figura en Maryland, estado donde es una celebridad porque llevó a la Universidad al título nacional y aún es el máximo anotador de su historia, su trayectoria es seguida en su lugar de origen, donde es muy famoso. Su tía Sheila fue alcaldesa de la ciudad y sus gestas deportivas calaron bastante hondo. Por ello, la propia esposa de Dixon, que vive en la cercana ciudad de Silver Spring con los dos hijos de la pareja, fue entrevistada por el periódico local, Baltimore Sun, con declaraciones que recoge la web tubasket.com. Robyn, así se llama la mujer, declara que su marido "tomó un suplemento sin receta y no tenía ni idea que contenía esteroides. No es como si se los hubiese inyectado. Jugó siete años en la NBA y no tuvo ningún problema, lo que te da a pensar que no debes tenerlos con estas sustancias vendidas sin receta".

En 2005, Juan Dixon fue invitado por el Congreso de los Estados Unidos a dar un discurso en contra del uso de los esteroides. Allí explicó que había triunfado "por el trabajo duro y la persecución de los sueños, no por el uso de esteroides u otras sustancias dopantes".

Dixon continúa en Málaga y desde el club se da por caso perdido su absolución, porque el propio jugador reconoció haber tomado un suplemento vitamínico, que podría ser, según Baltimore Sun, 19-norandrostenedione. El jugador estuvo el sábado en el entrenamiento del equipo y recibió las condolencias y los mensajes de ánimos de sus compañeros y técnicos, pero prefirió no acudir al encuentro del domingo. Son momentos duros para el escolta norteamericano, que, no obstante, ha superado pruebas más duras a lo largo de su vida. Le toca levantarse de nuevo.