Recién finalizada la primera vuelta y hasta que el duelo regional contra el Sevilla no rompa a hervir, los micrófonos ofrecen balance en Martiricos. Lo empezó Pellegrini, autocrítico, y en esa línea continúan las palabras que van llegando. Rondón, de los pocos que opuso resistencia al monopolio del Barcelona el pasado domingo, habló también sin tapujos sobre ello. "Se entiende el descontento del público por los resultados más que todo", fue lo primero que puso en la mesa. Pero el venezolano pide un voto de confianza; cree que hay motivos para ello: "El año pasado a estas alturas estábamos descendidos y la gente seguía apoyando encima de nosotros, y al final salvamos al equipo. No se ha acabado la temporada".

De otro modo más numérico, el vinotinto sabe que la primera evaluación deja apenas un aprobado. Pero confía en enmendar la plana desde este domingo y que el equipo esté a la altura de las expectativas. "A la primera vuelta le pongo cinco puntos; a lo mejor en la segunda vuelta son cinco puntos más y hacemos diez. Ha terminado la primera vuelta y ya es como la gente lo quiera evaluar. Nos separan de Champions seis puntos y la cosa no está tan mal como parece".

Por necesidades del guión, el Sevilla se convierte en el plato único del menú para el punto de inflexión. No hay otra después de seis partidos de Liga sin lograr los tres puntos. Sucede, además, que la visita de los hispalenses siempre encierra una emoción especial para el aficionado blanquiazul. Condimentos de sobra para que la segunda vuelta de la Liga marque un nuevo devenir para el Málaga. "Sería bonito empezar la segunda vuelta ganando con el rival de la acera de enfrente, será difícil pero tenemos que hacer lo que humanamente se pueda para ganar los tres puntos", añadió el delantero venezolano.

Sin embargo, a pesar de que en partidos como el que se viene la afición suele dar una marcha más, tal y como están las cosas la tortilla ha dado la vuelta y ahora serán los jugadores los que tengan que transmitir a los suyos su capacidad para revertir la situación. Rondón lo sabe: "Desde dentro tratamos de transmitir que aún no se ha terminado la temporada y el objetivo sigue intacto. Estamos tranquilos, estamos dando el cien por cien y esperamos en mayo estar en puestos europeos. Siempre vamos con la mentalidad y la intensidad de buscar tres puntos, a veces que te sale y a veces no".