Pasadas las cuatro de la madrugada del viernes el Unicaja aterrizó en Málaga con otro fracaso bajo el brazo. Tras la ausencia en la Copa del Rey, el equipo malagueño se despidió virtualmente de su participación en la Euroliga tras caer en Kaunas ante un devaluado Zalgiris. Así lo reconocía el propio Aíto García Reneses minutos después de caer en Lituania. "Hay que aceptar que no hemos sido capaces de ganar aquí y centrarnos totalmente en la Liga ACB. No hay que centrarse en unas posibilidades remotas y muy reducidas. Mentalmente hay que liberarse un poco y pensar en las posibilidades de seguir mejorando en la ACB", aseguraba el técnico.

El Unicaja no ha sido capaz de aprovechar un sorteo benévolo que le encuadró en el grupo más fácil del Top 16. La derrota del jueves y, sobre todo, la cosechada en casa ante el Asseco Prokom le dejan a las puertas de la eliminación cuando aún restan dos jornadas por disputar. Pero pese a volver a estar en una situación crítica y a pesar del escepticismo de Aíto, el conjunto cajista sigue teniendo alguna opción a la que agarrarse para seguir pensando en el play off previo a la Final Four. Remota y muy reducida, pero matemática y cierta al fin y al cabo.

La cuarta jornada no ha podido ser peor para los intereses malagueños. Su derrota unida al triunfo del Prokom sobre el CSKA deja ahora la segunda plaza a dos victorias. Polacos y rusos están con tres triunfos y malagueños y lituanos, con uno. Las combinaciones son múltiples pero el primer mandamiento es el de ganar el próximo miércoles al CSKA en el Carpena por la mayor diferencia posible y siempre por más de ocho puntos, que fue la desventaja por la que se perdió en Moscú. Si cae ante los moscovitas, estará matemáticamente fuera del play off. Si se cumple esta primera premisa, el Unicaja se presentará en la última jornada en Polonia con opciones de clasificarse, independientemente de lo que depare el Zalgiris-Prokom de la quinta jornada.

Sin embargo, el resultado de ese duelo entre lituanos y polacos determinará el panorama de cara la última y decisiva jornada. Si en ese encuentro gana el Zalgiris podría llegar a producirse un cuádruple o un triple empate final y si el que gana es el Prokom, el equipo de Aíto necesitará ganar en Gdynia y aguardar una victoria del Zalgiris en la pista del CSKA.

Números, cuentas en los que deben cumplirse dos axiomas: que el Unicaja gane los dos partidos que le quedan ante CSKA y Prokom y que el Zalgiris le eche una mano en forma de victoria, al menos, ante uno de sus dos máximos rivales. Además hay que vigilar el average particular con rusos y polacos (-8 y -20 respectivamente antes de volver a medirse a ellos) y el average general en caso de que haya que echar mano de él por triples y cuádruples empates (en la actualidad: +27 el CSKA, +40 el Prokom, -15 el Unicaja y -52 el Zalgiris).

Son las opciones remotas de estar en el play off europeo. Aíto prefiere no pensar demasiado en ellas, pero pensar sólo en la ACB cuando no se ha jugado la Copa y aún restan dos jornadas para el final del Top 16 resulta desolador.