El Real Madrid, líder de Primera división, reaparece en el nuevo año tras despedir el 2007 con un golpe en la mesa en el Camp Nou ante el gran rival, el Barcelona, y recibe en el estadio Santiago Bernabéu, donde ha ganado todo lo que ha jugado, a un equipo necesitado como el Real Zaragoza, diseñado para luchar por metas mayores.

Con la imagen de equipo mostrada en el Camp Nou aún en la memoria, vuelve el Real Madrid a escena con la consigna de Bernd Schuster, de evitar la relajación porque la Liga aún no está ganada pese a aumentar a siete la distancia con el Barcelona.

El primer partido de 2008, ante el Alicante en Copa del Rey, fue la oportunidad para suplentes y jugadores que piden a gritos volver a la titularidad, como José María Gutiérrez Guti.

Es el gran dilema de Schuster que no piensa en sentar a Baptista, que aprovechó su momento, y mucho menos después de su vistoso gol en el Camp Nou. El sacrificado podría ser Sneijder, pero todo indica que a una cartulina de cumplir ciclo, hasta que no la reciba no dejará su puesto en el once.

La seguridad defensiva del Real Madrid provoca que la baja de Pepe, no sea un quebradero de cabeza para el técnico. Pasará a Heinze al centro de la defensa y devolverá la titularidad a Marcelo en el carril izquierdo.

Mientras, el Real Zaragoza aterriza en Madrid sin ser el de la temporada pasada, inmerso en una racha negativa en Liga. Visita el estadio Santiago Bernabéu con la intención de dar la sorpresa y comenzar así su ansiada recuperación en el campeonato.

Si Víctor Fernández ya contaba con las bajas por lesión de César Sánchez, Cuartero, Generelo y Matuzalem para este encuentro, en la última sesión de entrenamiento Pablo Aimar ha recaído de las molestias que sufre en el pubis. Igualmente es baja Andrés D'Alessandro por decisión técnica. Todas estas incidencias han supuesto que el preparador zaragocista haya convocado a los 17 jugadores que tiene disponibles.

La única buena noticia ha sido que el delantero argentino Diego Milito sí podrá jugar, dado que el Comité de Competición aceptó las alegaciones del Real Zaragoza y le quitó la tarjeta roja.