Loren Morón llegó al Marbella en el peor momento de la pasada temporada. Pablo Alfaro, que había sustituido a Jaime Molina, era cesado tras meter al equipo en posiciones de descenso a Tercera División. Fue a partir del nombramiento de Loren cuando el equipo cambió radicalmente, acabando invicto los últimos ocho partidos de liga, lo que llevó al marbellí a una merecida renovación. Este año, con un ambicioso proyecto, busca corregir los errores pasados y ser protagonista en un Grupo IV de Segunda B que presenta, a priori, un nivel espectacular.

El equipo, que volvió al trabajo el miércoles, suma una docena de fichajes que "se han adaptado perfectamente a lo que queremos, la gente está asimilando muy bien las cargas de trabajo. Estábamos deseando que llegara el comienzo de los entrenamientos y las primeras impresiones son fantásticas", dice el técnico.

Los primeros días para un nuevo proyecto son clave para el entrenador. Es el tiempo en el que debe inculcar su filosofía, hacer entender a sus jugadores cuál es el camino a seguir. En ese aspecto, Loren lo ha tenido muy claro: "He insistido en el compromiso y el compañerismo, que para mí es lo más importante. Una vez que los jugadores tienen esto asimilado, es el balón el que toma protagonismo", a lo que Loren añade una nueva condición: "Tienen que disfrutar. No concibo el fútbol si no es disfrutando, es lo más bonito".

De los fichajes, a los que únicamente falta Yedra por sumarse a los entrenamientos, Loren afirma que son "los mejores que podían estar aquí". Gerrit, Juanfri, o Álex Portillo son sólo algunos de los jugadores que el Marbella ha logrado captar para ser pieza fundamental del proyecto. Para lograr sus firmas ha sido vital "la gran relación que tengo con José Manuel Hernández, el nuevo director deportivo del equipo. Estoy encantado con él".

La plantilla, a la que aún le resta "cuatro fichas por completar", puede verse aumentada con jugadores canteranos. "Nos están sorprendiendo gratamente los chicos del juvenil. Está Mico, que me está encantando. También Luisma, Pepe del Río o Millán. Quizá alguno se quede y no venga nadie de fuera", asegura Loren.

No será fácil el comienzo de temporada para el Marbella. Un histórico como el Murcia será la primera piedra de toque y, tras los pimentoneros, la visita a Melilla o el choque contra el Cádiz de la quinta jornada serán compromisos duros para los marbellíes, algo que no sólo no preocupa a Loren, sino que le agrada: "Me parece fenomenal. Ellos pueden pensar lo mismo de nosotros, que lo van a tener muy difícil para ganarnos". De todas formas, el preparador de los blanquillos no quiere pensar "más allá de la siguiente sesión de entrenamientos para que, cuando llegue el Murcia, hayamos mejorado lo máximo posible como equipo".

El equipo presidido por Alexander Grinberg formará parte de un grupo IV de Segunda División B que, para Loren, "es el grupo más fuerte. Vamos a tener campos que son de Primera División y tan sólo uno de césped artificial, algo que nos vendrá fenomenal".

Por último y, al ser cuestionado por la receta para lograr el objetivo, Loren echa la mirada atrás para avisar de cuál es el camino: "El año pasado nos salvamos por creer en el día a día, ahí está la clave. Evidentemente, todos queremos mejorar la décima posición, pero lo que nos hará fuertes será no mirar más allá del siguiente partido".