La engorrosa intervención judicial a la que está siendo sometido el Málaga ya tiene fecha de caducidad: finales de mayo. Es la fecha estimada por la administración concursal toda vez que ayer terminaron su informe preceptivo y hoy lo pondrán en disposición del juez de lo Mercantil, Enrique Sanjuán, quien emitirá su auto de sentencia dentro de dos meses. Asimismo, será cuando tenga lugar la esperada junta de acreedores, en un acto público que tendrá lugar en la Facultad de Derecho de Málaga, que decidirá el porcentaje de dinero al que tendrán que renunciar los adeudados del club para que en los cinco años posteriores la entidad de Martiricos le ingrese la cantidad restante progresivamente.

Según desgranó Daniel Pastor, el administrador economista, dicha quita ascenderá al 50 por ciento, mientras que la semana que viene se firmará con Hacienda el acuerdo al que se llegó la semana pasada, consistente en que la Agencia Tributaria, principal acreedor con unos 16 millones de euros, condonará el 20 por ciento a cambio de recibir el restante en un periodo de ocho años, si el Málaga sigue en Segunda División, o de cinco, si, tal y como parece, asciende a la máxima categoría. Una vez acabado el proceso, durante esos cinco años del proceso de pago habrá un interventor que controlará la buena gestión de la entidad si es que ésta así lo solicita.

Asimismo, en futuras fechas los administradores concursales se reunirán con la empresa ISO Consulting, tenedora de los derechos de publicidad de la entidad. Actualmente, el contrato que le liga a ella le genera al Málaga 90.000 euros. Sin embargo, un estudio encargado por el club a la firma alemana Sportmarkt semanas atrás concluyó que, en caso de una gestión magistral por parte de los actuales dirigentes, sus recursos publicitarios podrían elevarse hasta los 1,8 millones. Estaba previsto que dicho encuentro se produjera hoy, pero los responsables de ISO Consulting lo aplazaron porque ya tenían uno con miembros del Athletic.