Racing | málaga cF · la previa

Tres puntazos

  • Resquicio Los duelos de la jornada ofrecen un gran marco para que el Málaga se distancie del descenso Listón El reto es ratificar el buen poso contra el Mallorca, al contrario de lo que ocurrió ante el Levante

Habrá tanto dinero en el palco como sufrimiento en el verde. Ali Syed y Abdullah Ghubn, a la sazón el timón del Málaga, representan dos maneras distintas de un mismo sueño de grandeza: estridencia y protagonismo uno, pretendida normalidad el otro. Pero ninguno será el reflejo de su equipo esta tarde. El Racing engaña, tan pronto amaga con demarrar del todo como vuelve a resbalar y a otear el precipicio. Los blanquiazules han estabilizado sus pulsaciones, aunque aún no les da para saldar la deuda de una temporada dando tumbos. Los primeros inversores extranjeros de nuestro fútbol sueñan con cambiar el futuro; un pasado reciente lleno de costuras pesa más y define el intercambio de necesidades de hoy.

Para los de Pellegrini arranca una nueva etapa dentro de este complicado tramo final: por primera vez desde que el agua llega al cuello, el Málaga defiende posición y son otros los que intentan cazarle. De hecho, ambos contendientes tienen suerte de ver aún equipos por el retrovisor. Lo que pone en jaque la primera duda: ¿vale el empate? Mirando los puntos, le viene mejor al Racing, aunque ahora nadie quiere patinar en casa. Y rascar botín a domicilio refuerza el optimismo, pero a los malaguistas sólo les salva de la quema el average con el Zaragoza. Pensar que una igualada se puede hacer buena ganando el siguiente partido en casa es una cábala que ya ha hecho mucho daño esta temporada.

El último encuentro volvió a recuperar los valores de entrega y competitividad que se le piden al equipo en los partidos de la verdad. Mal digerido, puede hacer mucho daño. Queda muy cerca el ridículo del Ciudad de Valencia tras el partidazo contra el Espanyol. La última victoria ante el Mallorca, aliviadora, se convierte ocho días después en otro alto listón para un equipo que hasta ahora ha sido incapaz de fijar puntos de inflexión en la competición.

Por primera vez casi media Liga después, el Málaga no busca una victoria para respirar, sino para dar un puñetazo sobre la mesa. Compagina su partido con un Hércules-Deportivo, un Zaragoza-Almería y un Mallorca-Getafe, partidos añadidos a la derrota de Osasuna en Barcelona. El panorama clasificatorio puede dar un vuelco importante. Hay múltiples opciones de felicidad abiertas siempre que los de Pellegrini triunfen en El Sardinero.

Ha sido una semana fea. Con acusaciones públicas sobre intrigas de despachos entre la actual y la anterior presidencia, todo en un tono sibilino y nada conveniente para mantener el buen aura del último triunfo. Precisamente El Sardinero es campo amigo. El recuerdo más triste allí fue la destitución de Gregorio Manzano (no tanto para muchos de los futbolistas de ese plantel). Un 0-2 transformado en 2-3 con Peiró, la mejor victoria con Muñiz a domicilio en Primera (0-3, con un golazo de Caicedo incluido, su mayor contribución en su tibio paso por Málaga), un derechazo de Valcarce con la derecha por la escuadra... Resultados generalmente favorables que invitan a seguir con el optimismo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios