Zara es el nombre de una localidad turca y también de su correspondiente distrito en la provincia de Sivas (Anatolia central), nombre que acuñó en el siglo XII en honor a un influyente granjero armenio llamada Zaro. El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Sivas, Osman Yildirim, nació en Zara y cuando fundó la primera fábrica de lentes de contacto en Turquía le puso el nombre de su pueblo natal, Zara Lens.

Pero la Zara actual, la del siglo XXI, se las tiene que ver con un enemigo que jamás imaginó ni por su procedencia ni por las armas que portaría. Inditex, la mayor multinacional textil española, lleva años denunciando sistemáticamente a todos aquellos empresarios nacidos o con antepasados en esa localidad turca porque Zara es también el nombre de su marca más universal. Por eso Yildrim ha tenido que cambiar el nombre de su negocio hasta tres veces, según informa el diario Hürriyet. Y lo mismo le ha ocurrido a otras firmas de esa provincia o de Estambul.

Inditex no gasta un euro en publicidad y su visibilidad global se basa en buena medida en la apertura de tiendas Zara en lugares emblemáticos de todo el mundo. El grupo gallego tenía abiertas 1.098 establecimientos de esta enseña a 31 de octubre de 2007.