Los controladores aéreos no volverán a la mesa de negociación de su segundo convenio colectivo con los representantes de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) hasta que el gestor aeroportuario "cumpla sus compromisos" alcanzados en un acuerdo de mínimos el pasado 13 de agosto. Esta acusación fue negada por el ente público, que apunta que los controladores sólo han buscado una excusa para dejar de negociar.

En un comunicado, el presidente de la Unión Sindical de Controladores (USCA), Camilo Cela, señala que no van a volver a la negociación del convenio hasta que AENA lleve a cabo una serie de actuaciones, entre ellas la contratación de los alumnos de la vigésimo novena promoción del curso de controlador en Sociedad Estatal para las Enseñanzas Aeronáuticas Civiles (Senasa), y con ellas cumpla la promesa, escrita, de hacerlo.

Cela considera "absurdo" seguir con una negociación que para USCA, que agrupa al 97 por ciento de los controladores, es un "paripé" y explica que lo único que quiere AENA es "retrasar el tema y hacernos saltar y romper la negociación".

No obstante, Cela quiso dejar claro que los controladores aéreos mantienen la voluntad de continuar negociando, que han declarado "tantas veces", y afirmó que "no damos por rotas definitivamente las negociaciones", aunque matizó que lo que no quieren es entrar en el juego absurdo que, a su juicio, pretende AENA, y perder el tiempo.

La última promoción de controladores, la 29ª, cuenta con 47 trabajadores, es la penúltima de las que se está formando en AENA a través de Senasa , y aún quedan por acabar el curso otros 27 alumnos, cuya finalización está prevista para diciembre, indicaron fuentes de USCA.

Cela dijo que no hay una voluntad por parte de AENA de "negociación" y por ello comunicó que los controladores aéreos no piensan mantener ninguna negociación más con el ente público.

Fuentes de USCA señalaron que este retraso en la contratación de los nuevos controladores, que debería haberse realizado en julio pasado, es "una provocación más en el ya largo historial que se ha producido en los últimos doce meses, se supone que con el objetivo de cargarse la profesión".

Según el presidente del sindicato, el problema se produce en un momento de crisis con un alto índice de paro, y por ello "no entendemos que teniendo a controladores perfectamente cualificados, no se les contrate".

AENA: "Que dejen de buscar excusas para no negociar"

Por otro lado, un portavoz de AENA ha pedido a los controladores que dejen de buscar excusas para bloquear las negociaciones del segundo convenio colectivo.

El citado portavoz mostró la sorpresa que ha causado en el seno de AENA el comunicado difundido por el sindicato USCA, cuando "en la reunión de ayer, en la que se intercambiaron propuestas sobre la masa salarial para este año, no dijeron nada y se quedó para continuar la próxima semana".

AENA tilda de "excusa" hablar de la no contratación de los 47 alumnos que salieron en julio de Senasa e indicó que no estaba incluida en los acuerdos de mínimos firmado, por lo que "no entendemos que nos acusen de incumplir algo que no estaba firmado".

Asimismo, el portavoz del ente público agregó que AENA está cumpliendo escrupulosamente los acuerdos firmados en agosto, y como ejemplo indicó que se ha realizado el pago de los atrasos salariales y los complementos personales que han supuesto una media de 11.700 euros en octubre. También se ha abonado el seguro de vida pactado que ha supuesto un coste de media de 2.400 euros, añadió el portavoz.

Otros acuerdos que se han materializado han sido la modificación de la jornada, y que se ha basado en los cuatro días trabajados y dos de descanso. Y además, según el portavoz, se ha avanzado más de lo negociado por ambas partes en el caso de los controladores mayores de 57 años, ya que se ha aprobado en el Senado una enmienda que les va a permitir volver a realizar funciones operativas.

Desde AENA se acusa a los controladores de incumplir los mecanismos que ellos mismos aprobaron en cuanto a la normalidad operativa y a las horas extras, manteniendo un elevado absentismo laboral.