-¿La digitalización ha cambiado el paradigma del sector turístico, más allá de inclinar al cliente a la reserva directa?

-La digitalización ha traído dos cosas: primero, que ha cambiado la forma de reservar. Y segundo, el cliente es mucho más activo. Interactúa mucho más con nosotros. Hace diez años, cuando un cliente se iba suponías cómo había estado. Hoy te deja un comentario on line y te dice cómo ha sido su experiencia. Eso nos deja mucho margen para trabajar con el cliente y adaptar nuestro negocio a lo que demanda. Hacerle un traje a medida. Y eso es bueno.

-Esos cambios generalizaron el consumo turístico, pero crearon nuevos fenómenos, como el alquiler turístico urbano. ¿Cómo debe competir el sector además de pedir regulación?

-Lo principal es seguir trabajando. Somos hoteleros y nuestro cliente viene buscando unos servicios que la otra oferta no puede dar. Tenemos que seguir mejorando nuestras calidades y nuestros servicios. Cada uno de los segmentos tendrá que mejorar. Una ciudad puede regular conceptos de calidad si lo que quiere es lograr atraer a esos clientes que gastan más que otros. Nosotros tenemos que mejorar servicios, saber qué quiere el cliente. Si estoy detectando que ahora el huésped viene tres o cuatro días y antes venía uno, pues tengo que esforzarme en vender bien la ciudad, todos sus aspectos, con mejores servicios de consejería, con más personal que asesore bien sobre dónde ver una buena puesta de sol o dónde ir a comer las mejores tapas.

-Andalucía es uno de los mercados que, por problemas de seguridad de otros destinos, se ha recuperado incluso antes de salir de la crisis. ¿Qué valor le da a ese factor?

-A la seguridad le doy todo el valor. Creo que el Ministerio está trabajando bien y demostrando que somos un país seguro. Eso da tranquilidad a los clientes que van a nuestros destinos, que ven cómo se hacen trámites que contribuyen a ello, como la ficha para la Policía. También nosotros trabajamos para que el cliente se sienta seguro. Andalucía es un destino donde el turista encuentra seguridad y podemos decírselo así al cliente, que es prestado porque hay otros lugares que ahora son más inseguros. Y eso es una gran oportunidad. Tenemos que fidelizarlo, ofreciendo mejores servicios, más conexiones con nuestros aeropuertos...

-De eso quería preguntarle. ¿Qué hace bien Andalucía para que el turismo vaya lo bien que va?

-Todo es mejorable. Vamos muy bien, pero lo difícil de un destino que logra el liderazgo no es llegar a atraer clientela, sino mantenerla. Lo que hay que hacer, en Andalucía se ha hecho bien. Se ha mejorado una oferta gastronómica completándola con conceptos nuevos. Quizás, necesitamos mejorar en las escuelas para tener buenos cocineros que internacionalicen nuestro concepto de la tapa. Las ciudades han mejorado mucho el transporte público. Tenemos ahora mejor conexión terrestre que aérea. Nos queda Granada, pero a casi todos los destinos se puede llegar en AVE. En aeropuertos, Málaga lo ha hecho muy bien, Sevilla empezó a hacer sus deberes a partir de 2012, con nuevos horarios o conexiones con el centro de Londres. Pero se podría mejorar el servicio que damos en los aeropuertos. Somos ciudades que estamos en precios, no somos caras, con un clima magnífico, con muchos días de sol y que tienen una oferta cultural muy potente.

-Aunque la oferta andaluza sea muy completa, sigue el problema de la estacionalidad. En volumen, todavía es un destino más de playa que otra cosa, ¿no?

-Es verdad. Pero cada vez nos lo tenemos que creer más. Por la climatología única que tenemos, porque somos la región con más horas de sol de Europa, somos un destino fantástico para la playa, que podría ser menos estacional. Y en el ámbito urbano tenemos que reinventarnos y ser capaces de dar también en todo el año una oferta atractiva. Tenemos que atraer a un cliente que quiera tener otro precio. Con mi familia optaría por ir algunas ciudades en verano: voy a tener mejor precio, menos gente, mejores servicios. Y al final voy a poder disfrutar más. Hay una oportunidad de estar doce meses al año abiertos, reducir la estacionalidad y mejorar la ocupación media.

-Su cadena ha elegido Granada para desplegar por primera vez sus cuatro marcas a la vez. ¿Por qué han elegido Andalucía?

-Las marcas han nacido hace un año y se ha dado la circunstancia de que había oportunidad de que podíamos crecer en Granada. Se han juntado ambos hechos. La experiencia piloto es muy buena que sea aquí.

-¿No puede generar confusión segmentar tanto?

-No. Aunque al principio pueda costar, al final es una ventaja. Con la misma garantía seremos capaces de dar respuesta a cuatro conceptos distintos, y cada uno con su portal web.