l Decenas de trabajadores de Spanair se reunieron ayer en asamblea en la terminal 2 del aeropuerto de Madrid-Barajas, donde opera la aerolínea, para analizar su situación después de que el viernes anunciara el cese de sus operaciones. Belén, empleada de Spanair en Barajas, denunció que los 4.000 empleados están "a la espera" de que la aerolínea les dé una versión oficial, ya que lo único que saben es que están "en permiso retribuido" hasta tiempo indefinido. "Indignación, cabreo, dolor... se han preocupado mucho porque se han quedado en tierra miles de pasajeros pero a nadie le importan los miles de trabajadores que nos vamos a la calle también, todos somos parte de la movida (...). No sabemos ni qué va a ser de nuestra vida porque no nos cuentan nada. ¿Los jefes?, el piquito cerrado", explicó la trabajadora, con 12 años de antigüedad en la firma.